Policiales | 31 May Por segunda vez en menos de un año, la panadería sanducera ubicada en Luis Batlle Berres y Lucas Píriz fue blanco de los malvivientes que (con similar modus operandi) se llevaron la caja registradora con la recaudación de la jornada. Esta vez el hecho ocurrió próximo a las 19.30 de la víspera, ocasión en que en el negocio se encontraban tres mujeres.
De acuerdo con lo narrado por el propietario de la firma a EL TELEGRAFO, éste es “el segundo que tenemos” sumado a un intento de robo ocurrido “hará unos dos meses”. Esa vez, el o los malvivientes arremetieron contra la puerta principal y lograron romper un vidrio, pero no ingresaron ya que cuenta “con una puerta enrejada por dentro”, indicó.
En tanto, en esta ocasión, el delincuente ingresó con ropas oscuras y casco integral negro como un potencial cliente, tal como se aprecia en el video captado por las cámaras de videovigilancia del lugar (a las cuales EL TELEGRAFO tuvo acceso), y aprovechando que junto al mostrador no había nadie, tomó la caja registradora, que contenía unos 4.000 pesos. Al intentar huir con ésta, experimentó alguna dificultad ya que el cable de la misma estaba pegado al suelo; al quedar enganchado, desestabilizó el mostrador de vidrio, hasta arrancarlo. “Lo pegamos porque al moverla se desconectaba y al intentar cinchar quedó como trabado con el mostrador”, dijo el propietario. De todas maneras, el malhechor logró su cometido, que le demandó casi 7 segundos, y huyó con la caja hacia el exterior del local donde le aguardaba su secuaz, a bordo de una motocicleta. Una vez en el birrodado, ambos se dieron a la fuga por Lucas Píriz al oeste.
Asimismo, la señora del propietario, quien estaba junto a dos empleadas, narró que se encontraban en la parte de la cocina desde donde “se ve hacia el mostrador porque tiene una pared tipo mampara con agujeros”. “Sentimos que se abrió la puerta, que la habíamos cerrado por el frío, y escuchamos además el sensor de movimiento. Una de las chicas fue a atender pensando que era un cliente y en eso el tipo, con una rapidez absoluta, se llevó la caja. Salimos corriendo a los gritos pero se fueron enseguida en una motocicleta”, agregó.
“En la imagen captada por la cámara se llega a divisar un rostro”, dijo el dueño. Por lo que se puede estudiar, se trataría de un joven delgado, cutis blanco y de estatura promedio a 1,80 metro. “Después del primer robo pensé en amarrar la caja pero fue pasando el tiempo y no se hizo, pensando también en que no pasaría de nuevo. Lamentablemente pasó”, dijo.
Por su parte, la Policía tomó conocimiento del hurto y rápidamente dio a conocer los datos, en cuanto a la descripción fisonómica, del delincuente a los móviles que se encontraban realizando patrullaje.

MISMO MODUS OPERANDI
El pasado 18 de agosto de 2015, la panadería sufrió el primer robo de este tipo, en que los autores se apoderan de la caja registradora. Si bien la modalidad fue similar, en esa instancia, el malviviente --quien según confió la Policía al denunciante aún estaría recluido-- actuó próximo a las 7 de la mañana.
El sujeto, un hombre joven, delgado, vestido con canguro gris con capucha y campera deportiva gris y azul, entró al comercio, se dirigió directamente a la caja registradora, la tomó y, al retirarla arrancó los cables de corriente, arrastrando un mostrador vitrina en el proceso, para retirarse raudamente del lugar. El hurto le demandó 9 segundos, según quedó registrado en un video que posteriormente se viralizó en la red social Facebook.