EN LICEO DE QUEBRACHO

Locales | 09 Jun (Por Aldo Boffano) En el marco de un proyecto elaborado por el Plan Ceibal, denominado “Diseñando el cambio 2016” --en el que participan 44 grupos en el país--, el departamento de Paysandú tiene designados dos grupos de estudiantes y profesores de Secundaria y uno de UTU. En el Liceo de Quebracho está uno de los equipos elegidos para participar y, en Paysandú ciudad, los otros dos.
EL TELEGRAFO estuvo presente en una de los talleres del Liceo de Quebracho para hablar con profesores y estudiantes, y saber más acerca del proyecto. La docente Naira Castro manifestó que “luego de consultar con los profesores sobre la posibilidad de participar, se dio a conocer la propuesta a los alumnos de segundo, tercero y cuarto año. Logramos así un total de 23 estudiantes interesados”.
“La propuesta del Plan Ceibal”, según la adscripta Mónica Berlocco, “establece que deben ser cinco docentes y cinco estudiantes para integrar cada equipo, por lo que sorteamos entre los inscriptos, buscando que hubiera un alumno por nivel de grupo”. El Plan Ceibal “apunta, con estos proyectos, a propuestas educativas que tanto alumnos como docentes de los centros quieran para crear nuevas estrategias, nuevas metodologías para enseñar y aprender mejor. Nuestro grupo buscó un nombre para identificarse y participar, y fue designado, por alumnos y docentes que participamos, “Revolution Quebracho”.
El profesor Enrique Salayeta fundamentó el nombre y expresó que “dentro de la temática que plantea el Plan Ceibal, está el cambio. Buscamos palabras que tuvieran relación con él, pero apuntamos a la revolución porque tiene que ser rápido”, y a la vez, “lo asociamos con un acontecimiento histórico que pasó en Quebracho, aggiornándolo un poco, poniendo el nombre en inglés”.
Sobre el proyecto, la alumna Carolina Ifrán dice que “apunta a atender el problema que detectamos: la falta de motivación e interés de los estudiantes en concurrir. Está bueno, porque hay que cambiar muchas cosas, ya que (a muchos estudiantes) no les hace gracia venir al liceo”. A su vez, Xiomara Pesoa, otra alumna del equipo, complementa: “A veces parece que se aburren (los alumnos); nos cuesta y no nos motiva tanto leer libros. Además, podríamos utilizar más la tecnología y estar más comunicados entre alumnos y profesores”.
Detectado el problema, Pesoa dice que “con la ayuda de quienes no están en el equipo se nos planteó hacer una aplicación en el celular, desechando algo que se manejó en principio: el Crea II, que es una plataforma Ceibal”. Surgió así “la idea de buscar una aplicación, descargarla en el celular para que nos lleguen notificaciones de deberes y entregar deberes atrasados de diferentes materias”.

INTEGRACIÓN DE ALUMNOS Y PROFESORES
La manera de integrar al resto del alumnado, según Castro, es “informando en cada clase cómo vamos avanzando y cada decisión que se va tomando en el equipo para rediseñar el cambio, tanto a través de los docentes como de los alumnos que integran el equipo. Semana a semana, se les informa y, cuando es necesaria alguna decisión nueva, se les pregunta. Reunimos respuestas y seleccionamos, de todas, la que creemos que se adecua a la solución del problema que nos planteamos”. Paralelamente, según Barloco, “con los profesores, utilizamos la hora de coordinación de centro para poder ponerlos al tanto y sacar otras ideas que ellos puedan aportar para este diseño nuevo que estamos organizando”.
A esta altura, se está en algo más del 50% del proyecto, ya que “estamos en la etapa de buscar la solución; primero hay que probarla y después hacerla aplicable, en este caso, a todo el centro y, si es posible, también a otros centros de Quebracho”. El trabajo “comenzó el 29 de abril y debe terminarse en la segunda semana de julio”. Pudo saberse que “habrá premios entre todos los equipos que participan y nos tenemos fe”, puntualizaba Pesoa. Terminado el proyecto, “hay que presentarlo en Montevideo, donde nos reuniremos con todos los demás equipos de Uruguay y, en la última semana de julio, el equipo deberá viajar a la capital. Nos encontraremos con las más de 330 personas que están trabajando en 'Diseñando el cambio' y la idea es intercambiar con ellos lo que hicimos y lo que hicieron los demás para generar ideas nuevas”, concluyó Castro. Rocío Anchorena, alumna integrante del equipo, dijo que “vamos muy bien y creo que hay expectativas para hacer un gran proyecto. Creo que va a salir muy bien y que podremos impactar”, finalizó.