Policiales | 17 Jul Desde la asunción del comisario general (R) Luis Mendoza al mando de la Jefatura de Policía de Paysandú, la institución cuenta con la Oficina de Análisis Criminal y Estadística, instrumentándose así el uso de la georreferenciación. Esta herramienta permite a la Policía un certero diagnóstico de problemas de seguridad ciudadana en el ámbito local, para así elaborar líneas de acción para contrarrestar los delitos y comportamientos hostiles en diferentes zonas del departamento.
Esto ha permitido una reorganización en el servicio, dotando de mayor patrullaje las zonas denominadas “calientes”, donde existe mayor concentración del delito, así como rotar el personal al horario en que más se percibe actividad delictiva. Además, de acuerdo con el informe presentado por Jefatura, se ha constatado un descenso en algunos delitos durante los casi cuatro meses de gestión del nuevo Comando.
La Oficina de Análisis Criminal y Estadística depende directamente de la Dirección de Coordinación Ejecutiva, a cargo del comisario mayor William Pereira. En tal sentido, Pereira indicó que el uso de la georreferenciación fue “después que este Comando asumió y empezó a ver la problemática en general en cuanto a la delincuencia. Se comenzó a hacer un estudio del delito y los lugares puntuales donde se registraba, la cantidad, el flujo y los horarios”.
“Todo eso permitió hacer un análisis criminal para determinar las causas, la metodología y los factores, ya sean culturales, sociales o económicos, que llevan al delito. Planteamos una estrategia basada en los recursos humanos y logísticos que posee esta Jefatura para cumplir las líneas de acción. Como primera medida vimos la necesidad de tener una Oficina de Análisis Criminal y Estadística para el estudio sustentable y veraz, además de poder establecer puntos con la georreferenciación, en el marco del Sistema de Gestión de Seguridad Pública”, dijo el director.
La georreferenciación “nos permite hacer un cruzamiento de análisis para medir la violencia y la criminalidad”.
“El sistema se nutre principalmente de la denuncia. Por eso se insiste tanto en que se denuncien los hechos, pues eso permite plasmar sobre el mapa la ubicación de donde se registraron los hechos y así hacer un análisis para poder dar una mejor respuesta a la sociedad”, agregó Pereira.
En tanto, el director de Coordinación Ejecutiva explicó que el estudio se hace a través de tres análisis. El primero es por puntos en los mapas, “lo que permite observar la dispersión de hechos delictivos”.
“Luego se elabora una retícula, donde se observa la concentración de los hechos delictivos y los mapas de calor, ya sea en la intersección de una calle, un barrio o una localidad. Y después se elabora un cuadrante, es decir se selecciona el lugar de mayor concentración del delito para realizar el patrullaje preventivo y disuatorio”.

ESTUDIO SOBRE LA CIUDAD
La presentación de los análisis permitió saber que durante junio la mayor cantidad de hurtos ocurrió en el período comprendido entre los días 11 y 20, con 110 denunciados.
Los días de mayor concentración de delitos fueron los jueves (55), siguiéndole los martes (52). Asimismo, es llamativo que el día de menor número de hechos, estadísticamente, es el domingo. Y el rango horario donde se concentraron los mayores hechos es el comprendido entre las 14 y las 22, “lo que también hizo que Jefatura cambiara la dinámica del personal y se asignaran más efectivos durante ese horario para combatir el delito, lo que viene dando un buen resultado”, agregó.
Por jurisdicciones urbanas, la Seccional Primera sigue siendo la que concentra mayores denuncias “porque abarca la mayor cantidad del radio de la ciudad y el centro”, precisó Pereira. En abril recibió 114 en total; le sigue la Seccional Segunda con 74; la Tercera con 56; la Quinta con 23; y la Cuarta con 18.
“El estudio nos dio como resultado que, según las estadísticas, los delitos vienen disminuyendo”, sostuvo el comisario mayor.

DISMINUCIÓN DE DELITOS
Las gráficas que dio a conocer Jefatura enseñan un descenso en algunos delitos perpetrados en nuestro departamento, si se toman en cuenta los casi cuatro meses del nuevo Comando --al mando del jefe Mendoza-- y se le compara con igual período de 2015.
Del estudio realizado por este medio se puede ver que los delitos que disminuyeron son los hurtos, arrebatos, hurto de vehículos, rapiñas y homicidios. El guarismo más significativo corresponde al hurto de vehículos (en su mayoría, motocicletas) que pasó de 283, entre abril y junio de 2015, a 161, en igual período de 2016; así como las rapiñas, que pasaron de 28 a 10.
En tanto, los casos de abigeato tuvieron un leve ascenso, de tan solo cinco denuncias formuladas. Sobre esto Jefatura apuesta a que la creación de la Patrulla Rural, que estará conformada por al menos 25 efectivos próximos a ingresar, permita un mayor control y el cese de esta práctica.