Opinion | 17 Jul “Circula en las redes y se ha viralizado” (afirmamos, para no sonar desactualizados) un artículo titulado “Bienvenidos a la Era Exponencial” donde Hugo Calzada (¿?) plantea esquemáticamente cómo será la vida en un futuro muy cercano. Bien sabido es que un buen gobierno es aquel que cumple con sus obligaciones y la de prever el futuro es una de las principales, si no la principal.
Como el espacio es tirano, transcribiremos sólo parcialmente párrafos del mencionado artículo comentando las situaciones en las que, consideramos, se deben tomar medidas actualmente.
Expresa la nota: “En 1998, Kodak tenía 170.000 empleados y vendía el 85% de todas las fotos en papel del mundo. En muy pocos años, su modelo de negocio desapareció llevándolo a la quiebra. Lo que le pasó a Kodak le pasará a muchas industrias en los próximos 10 años, y muchas personas no se dan cuenta. ¿Ud. pensaba en 1998 que 3 años más tarde no volvería a tomar fotografías en papel?”
“Sin embargo, las cámaras digitales fueron inventadas en 1975. Las primeras tenían solo 10.000 pixeles, pero siguieron la ley de Moore. Como todas las tecnologías exponenciales, fueron una desilusión por un largo tiempo antes de que se convirtieran en muy superiores y fueron la tendencia principal en pocos años. Ahora pasará con la Inteligencia Artificial, salud, automóviles eléctricos autónomos, educación, impresión 3D, agricultura y puestos de trabajos. Bienvenido a la 4ª Revolución Industrial. El software cambiará la mayoría de industrias tradicionales en los próximos 5-10 años”. 
“Uber es solo una herramienta de software, no posee ningún vehículo, y ahora es la compañía de taxis más grande del mundo. Airbnb es ahora la compañía de hoteles más grande del mundo a pesar de no poseer ninguna propiedad”.
Automóviles autónomos: en un ejercicio de futurología, podemos suponer que en 2018 aparecerán al público los primeros autos autónomos. Alrededor de 2020, toda la industria comenzará a tener problemas. No querrás volver a tener un auto. Llamarás un automóvil con tu teléfono, aparecerá dónde estás y te llevará a tu destino. No tendrás que estacionarlo, solo tendrás que pagar por la distancia recorrida y podrás trabajar mientras viajas. Nuestros hijos no necesitarán una licencia de manejo y nunca poseerán un auto. Las ciudades cambiarán porque necesitaremos un 90%-95% menos de autos. Podremos transformar las playas de estacionamiento en parques. 1,2 millones de personas en el mundo mueren cada año por accidentes de auto. Ahora tenemos un accidente cada 100.000 kilómetros, con los autos autónomos eso cambiará a un accidente en 10 millones de kilómetros. Esto salvará un millón de vidas cada año.
Llevemos este punto al Paysandú de hoy, o del futuro cercano. En este momento el tránsito sanducero es, para decirlo delicadamente, acalambrante.
Vamos por partes: Uber es una realidad y como tal, tarde o temprano vendrá a Paysandú salvo que hagamos las cosas rápido y bien. Es de preguntarse por qué la Dirección de Tránsito de la Intendencia Departamental no convoca a los taximetristas y conforma un sistema, una aplicación, que “maneje” los vehículos de alquiler. De esta manera el servicio sería mucho más eficiente y la computadora “de turno” podría constatar el momento en el que no haya ningún vehículo disponible y, entonces, llamar a un automóvil particular que oportunamente hubiese sido registrado.
Por otra parte, sobre el mismo tema, es probable que el problema de estacionamiento en el centro, que hoy es desesperante, demore demasiado en arreglarse con el ingreso de vehículos inteligentes por lo que deberíamos construir enormes estructuras para albergar los vehículos que vienen al centro en cuya zona estaría prohibido el estacionar y sólo se permitiría detenerse para ascenso o descenso de pasajeros, cargas, suministros, etc. Si algún día las estructuras, que no tienen porqué ser antiestéticas, dejan de ser necesarias pueden perfectamente ser transformadas en edificios habitables o para oficinas.
Veamos otras predicciones que seguramente nos afectarán: Impresión 3D: El precio de la impresora más barata bajó de U$S 18.000 a U$S 400 en 10 años (incluso en Uruguay). En ese mismo tiempo, se volvió 100 veces más rápida. Todas las grandes compañías de zapatos comenzaron a imprimir zapatos en 3D. Partes de aviones actualmente se imprimen en 3D en aeropuertos remotos. La estación espacial tiene ahora una impresora que elimina la necesidad de grandes cantidades de repuestos que solían tener en el pasado.
Al final de este año, los smartphones nuevos tendrán posibilidades de escanear en 3D. Entonces Ud. podrá escanear su pie en 3D e imprimir el zapato perfecto en su casa. En China ya han impreso en 3D un edificio de 6 pisos. Para 2027, el 20% de todo lo que se produce será impreso en 3D”.
 Agricultura: Habrá un robot de U$S 100 en el futuro. Los agricultores en los países del tercer mundo podrán convertirse en gerentes de sus propios campos en lugar de trabajar todos los días en sus campos. Los hidropónicos necesitarán mucha menos agua. Los primeros terneros producidos en placas Petri (los científicos hacen crecer bacterias en placas Petri para uso experimental) están ahora disponibles y serán más baratos que los producidos por ganado vacuno para el 2018. Ahora mismo, el 30% de toda la superficie agrícola es usada para ganado vacuno. Imagínese si no se necesitase más ese espacio. Hay varias empresas start-up que brindarán proteínas de insectos pronto. Contienen más proteínas que la carne. Será marcada como “fuente de proteínas alternativas” (porque la mayoría de las personas todavía rechazan la idea de comer insectos). 
Los bitcoins se convertirán en uso normal este año y podrán incluso convertirse en la reserva de las monedas.
Educación: Los smartphones más baratos están ya a U$S 10 en África y Asia. En 2020, el 70% de toda la humanidad tendrá un smartphone. Eso significa que todos tienen el mismo acceso a educación de clase mundial. Cada niño podrá usar la academia Khan para todo lo que un niño aprende en la escuela en países del Primer Mundo. Ya se ha lanzado ese software en Indonesia y lo lanzarán en Arabia, Swahili y China este verano porque tiene un enorme potencial. Se dará la aplicación en inglés gratuitamente, por lo que los niños en África podrán hablar inglés fluidamente. Esto permite suponer que los niños prefieren aprender que jugar juegos en sus teléfonos y sólo socializar.
Hay en este artículo muchos otros ítems que son realmente preocupantes, no porque sean peligrosos sino porque serán cambios que pueden sorprendernos y tomarnos totalmente desprevenidos.
Ante ello, nos preguntamos ¿No debería el Gobierno Departamental en su conjunto establecer un pequeño organismo que le asesore las posibilidades que plantee el futuro estrictamente desde el punto de vista técnico?