Locales | 29 Jul MONTEVIDEO, 28. (Por Enrique Julio Sánchez) A las 14.46 fue proclamado presidente del Congreso de Intendentes Daniel Martínez, intendente de Montevideo, pasando así la presidencia al Frente Amplio. En tanto, la primera vicepresidencia fue ocupada por Carlos Enciso, intendente de Florida, y la segunda vicepresidencia por Marne Osorio, intendente de Rivera. El uno integrante del Partido Nacional, el otro del Partido Colorado. Asimismo, la secretaría del congreso pasó a manos del consejero Humberto Castro, también en representación del Frente Amplio.
Como pocas veces se ha apreciado en el congreso, fue notoria la falta de intendentes titulares. Jesús Bentancur representó a Maldonado, Fabián Boquer a Salto, Pedro Bidegain a San José y Juan José Menéndez a Tacuarembó.
Paysandú estuvo representado por su intendente (en ejercicio), Marco García, en tanto el principal asesor, Gastón Núñez, debió trasladarse a Salto por tareas académicas.
Más de cien personas presenciaron la elección de autoridades –primero-- y su toma de cargos posteriormente. De todas maneras, las tres votaciones fueron meramente actos formales, pues ya estaban consensuados los nombres.
Entre los asistentes se encontraban el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro; los senadores Jorge Larrañaga y Mónica Xavier; los viceministros de Relaciones Exteriores, José Luis Cancela, y de Ganadería, Agricultura y Pesca, Enzo Benech; el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Álvaro García; y los presidentes de UTE, Gonzalo Cajaravilla, y de OSE, Milton Machado.
La palabra más reiterada fue “unidad” y fueron frecuentes las alusiones al trabajo conjunto y al consenso, entre los intendentes.
Marne Osorio, quien permanecerá como segundo vicepresidente durante todo el período de gobierno en la medida que es el único intendente del Partido Colorado, agradeció “el compañerismo y la contracción al trabajo en la Mesa que hoy culmina su tarea”. Subrayó “el honor de poder continuar trabajando para el congreso desde esta nueva Mesa con el Pájaro (el intendente de Florida, Carlos Enciso) y con el intendente de Montevideo. Vamos a hacer un trabajo extraordinario para la fraternidad en la institución”.
Aníbal Pereyra, intendente de Rocha, el otro integrante de la Mesa cesante, comentó, antes de referirse a su labor en la Mesa: “todos le decimos Pelado (a Daniel Martínez, intendente de Montevideo), pero hoy en la formalidad nadie le ha dicho así”. Tras la broma, aseguró que “en el año se ha puesto capacidad de trabajo y hubo un equipo con mucha capacidad de diálogo y articulación, buscando el equilibrio aun en los momentos más complejos, como el caso del acuerdo por el presupuesto quinquenal”.
Sergio Botana, el intendente saliente, en su mensaje final destacó: “estuvimos juntos en todos los momentos, en las negociaciones, en las discrepancias o cuando el clima nos jugó una mala pasada”. Agradeció “especialmente a los integrantes de la Mesa y a todos los integrantes de este cuerpo donde prima la enorme voluntad de lograr acuerdos verdaderos, donde la búsqueda del consenso es la búsqueda del convencimiento interior de cada uno de nosotros”. Destacó también el respaldo del “presidente de la República, que nos atendió en todos los momentos; que vino a este congreso, que nos recibió en (la residencia presidencial de) Suárez y en la Torre Ejecutiva”.
“Tengo el enorme agradecimiento por este año que ha sido de unidad, en el que hemos tratado de fortalecer al Congreso Nacional de Intendentes, porque es el único organismo de todo el Estado uruguayo que lleva en su esencia la idea de organización institucional federal de José Gervasio Artigas. En ese territorio (el interior del país), hay enormes necesidades y tienen que llegar para ser tomadas en cuenta en la construcción del país”, expresó también el intendente de Cerro Largo.
Luego entregó la presidencia y el uso de la palabra a “un amigo que nos ganamos allá en la Antártida, compartiendo en la base Artigas de Uruguay. Lo aprendimos a valorar como persona y a aquilatar como hombre político y como dirigente de gran capacidad de diálogo, imprescindible para el tiempo que se viene. (…) La Mesa del congreso no puede quedar en mejores manos”, concluyó.
Daniel Martínez fue el último orador de la 14ª Sesión Plenaria, de carácter protocolar. Con la misma sonrisa con la que había ingresado a la sala unos cuarenta minutos antes, con la misma mirada franca, aseguró que “se ha mencionado muy bien y con insistencia el nivel de acuerdo; los hechos nos unen a los intendentes para buscarles soluciones. Hay que cuidar ese nivel de acuerdo como la luz de los ojos, con el alma, porque nos ha hecho fuertes y nos ha permitido llegar adonde llegamos”.
Se comprometió a “profundizar la descentralización, manteniendo la unidad y coherencia con el proyecto nación que nos une a todos”. Para eso será necesario “coordinar y aplicar políticas comunes en todo el territorio, partiendo de políticas municipales y departamentales”.
“Hay que pensar en clave país”, agregó Martínez y se refirió a la importancia de impulsar “grandes obras” en infraestructura, turismo, planificación territorial y seguridad entre otros.
“Me atrevo a sumar, trabajar en tecnología, tanto para solucionar los grandes problemas de los ciudadanos como para transparentar nuestra función”.
“Quiero expresar mi compromiso y mi convocatoria a trabajar juntos, esa es la historia del Congreso de Intendentes y tengo la certeza que es la senda por la cual tenemos que seguir trabajando”, concluyó.
Después, volvió a los abrazos de colegas y autoridades presentes. Lentamente la herradura fue quedando vacía, sin voces, sin aplausos. En un mes volverá a ser ocupada por los intendentes, ya sin discursos y sí con mucho trabajo.