Nacionales | 08 Ago El abogado del expreso sirio de la cárcel de Guantánamo, Jihad Ahmad Diyab, detenido en Venezuela tras dejar Uruguay en junio, pidió el sábado a las autoridades venezolanas permitirle comunicarse con su cliente para organizar su defensa.
“Llamo respetuosamente al gobierno venezolano a suministrar a Diyab defensa legal y me permita hablar con él por teléfono de inmediato”, pidió el abogado estadounidense Jon B. Eisenberg en un comunicado al que tuvo acceso la AFP.
“Su detención implica que está incomunicado y al parecer sin derecho a un proceso legal”, agregó el jurista, que expresó preocupación por “las condiciones de su actual confinamiento y la posibilidad de que haya vuelto a la huelga de hambre”.
Eisenberg representó a Diyab en una demanda presentada contra la alimentación forzosa de reos en huelga de hambre en la prisión estadounidense de Guantánamo, antes que fuese traslado a Uruguay en 2014 junto a otros cinco exdetenidos, en calidad de refugiados, tras un pacto de gobierno a gobierno.
Diyab se encuentra recluido en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) --policía secreta-- en Caracas, confirmó a AFP el activista estadounidense de derechos humanos Andrés Conteris, quien viajó a la capital venezolana para contactar al sirio.
Funcionarios del Sebin entregaron “una lista de cosas que requiere”, relató Conteris, integrante de una ONG que presta apoyo a detenidos de Guantánamo. Comida, ropa y productos de higiene personal se cuentan entre las peticiones. Sin embargo, aclaró que no pudo “tener comunicación directa” con el refugiado.
A la espera de respuesta del gobierno de Venezuela, Conteris adelantó que “es una posibilidad” que Diyab “sea deportado a Uruguay, pero se está pidiendo que sea enviado a Turquía o a un tercer país, un país árabe, para que pueda reencontrarse con su familia”.
Eisenberg y Conteris señalaron que no han podido hablar con Diyab desde el 5 de junio, cuando todavía estaba en Montevideo.
La Cancillería uruguaya confirmó el pasado 27 de julio que Diyab reapareció ese día en Venezuela, presentándose ante el consulado uruguayo en Caracas, donde pidió que se lo trasladara a Turquía, donde se encuentra su familia.