DIPUTADO EDUARDO RUBIO

Locales | 17 Ago Entre sus habituales giras por el país, la semana pasada Eduardo Rubio, único diputado del partido Unidad Popular, estuvo en Paysandú para acercarse a la realidad de la ciudad y del departamento, y recoger las inquietudes de la población. Aseguró que se encuentran en una nueva etapa de esta bandera política, que suele ser más oposición del Frente Amplio (FA) --pese a que son escindidos de este-- que el Partido Nacional (PN) y el Partido Colorado (PC), signada por un mayor acercamiento a los barrios de Uruguay, “como lo marca la vieja historia de la izquierda”. El integrante del Movimiento 26 de Marzo indicó que la política económica del gobierno ha fracasado por seguir un modelo neoliberal, como los partidos tradicionales, y fustigó los acuerdos por seguridad que prevén mayor represión.
La Rendición de Cuentas presentada por la administración de Tabaré Vázquez que se discute en el Parlamento es la “demostración del fracaso de una línea económica” y del “modelo neoliberal”. “Fracasaron en todas las previsiones que se habían hecho y es algo que el equipo económico reconoce. Dicen que fallaron todos y que ellos hayan errado no era tan grave. Lo que es grave entonces es que la proyección que nos hacen ahora la hacen respaldándose en la previsiones de los mismos que le erraron. Es muy poco serio”, dijo Rubio a EL TELEGRAFO. “Estamos ante un gobierno neoliberal, de políticas privatizadoras, que ha sido consolidadora de los modelos del PN y PC”, insistió.
La Unidad Popular ha sido más dura con el ajuste que el resto de la oposición. Esto no resulta “extraño”, según el diputado. “Porque tanto el PN como el PC, cuando gobernaban, siguieron la misma línea de ajustes del FA. Ellos claman por la reducción del gasto público, piden un ajuste porque es la línea neoliberal. Ante una crisis --como la de ahora-- han utilizado la misma receta: que paguen los trabajadores y que se recorte el gasto social o público. Subrayó que la postura de su partido se encuentra en la “vereda de enfrente”. Reclaman no rebajar los salarios, incrementar el salario real y las jubilaciones, aumentar la inversión pública para generar trabajo y ganar en soberanía.

TERCERA PLANTA
Rubio criticó la idea de instalar una tercera planta de celulosa que afrontaría UPM y se instalaría en algún lugar sobre el río Negro. Argumentó que no traen riquezas y que las recesiones igual llegan. “El PBI crecerá y durante un año trabajarán 5.000 personas; pero al mismo tiempo vamos a extranjerizar más tierras, expulsaremos más productores del campo y llenaremos de eucaliptos el campo uruguayo. Luego, el país volverá al mismo nivel de producción. En 2002, nos mató la crisis. A la salida, se instaló la primera planta y hoy hay otra, y Uruguay vuelve a la crisis. Las plantas de celulosa han demostrado no ser una solución a la crisis, ni al empleo ni a la generación de riqueza”, explicó.
El diputado izquierdista detalló las propuestas de Unidad Popular para generar recursos y mejorar las cuentas del Estado. “En la Rendición de Cuentas planteamos 18 sustitutivos. Muchos de ellos describen de dónde sacar recursos”, aseguró. Pidió cortar el subsidio de 13.000.000 de dólares anuales a Hípica Rioplatense, que se destina para los premios de las carreras de caballos en Maroñas y Las Piedras, y destinarlo a la Universidad de la República; grabar toda la mercadería en tránsito que no pague impuesto --“el bagayo legal, al que no se le aplica el cero kilo”-- con una tasa de tres por mil, lo que le generaría al Estado 21.000.000 de dólares al año; derogar la ley de inversiones, un “instrumento netamente neoliberal”, donde se resigna solo por el IRAE unos 4.000 millones de pesos; quitar toda la exoneración fiscal a la forestación; y postergar el pago del interés y amortización de la deuda pública, que el país debe acometer en 2017 por 2.700 millones de dólares.
Estas propuestas no tuvieron andamiaje en el Parlamento. “En todas estas cosas todos los partidos opinan lo mismo: salvar al capital especulador y financiero. En el modelo neoliberal hay acuerdo entre los que defienden este sistema. Aunque sé que muchos diputados del FA votan por disciplina partidaria”, añadió Rubio.

LA SEGURIDAD
El grupo del diputado participó de las reuniones por seguridad convocadas por el presidente Vázquez en la Torre Ejecutiva. Durante más de tres meses, abordaron un asunto “grave” que preocupa a la sociedad. “Planteamos que debíamos discutir cuáles son las causas estructurales de la violencia social. Llevamos el análisis sobre esta situación además de propuestas, como un plan nacional de vivienda, el desarrollo de 100 plazas de deportes en los barrios problemáticos, una política carcelaria distinta”, aseveró.
“Pero encontramos que entre los otros partidos se consolidó un consenso netamente represivo y de incremento de las penas. Discrepamos totalmente con esta idea. Está demostrado a nivel internacional que el endurecimiento de la represión, incluso la infracción penal, no solo no ha revertido la violencia social, sino que la incrementando en su forma y nivel de organización”, dijo Rubio. El acuerdo alcanzado, del que no formó parte Unidad Popular, estableció siete proyectos de ley que ya se encuentran en el Senado. “Esto sucede en un país donde estamos sobrepoblados de presos, donde pasamos de 1.400 presos en la década de 1990 a 14.000 en la actualidad. No hay lugares en la cárcel. Más que reeducar, se educa para la delincuencia. Me parece absurdo”, insistió el legislador.
“Vázquez convocó estas reuniones porque el gobierno estaba desbordado con el asunto. Pero no se encontró ninguna común acuerdo. No va a deparar más paz social, sino que habrá una reproducción de la violencia”, continuó Rubio. Sí estuvieron todos de acuerdo con la creación de un comité de combate al narcotráfico. “Ese proyecto salió con un apoyo global”, concluyó.