Locales | 11 Sep El diputado Nicolás Olivera presentó un proyecto de ley que permitiría a Obras Sanitarias del Estado (OSE) reducir sustancialmente la cantidad de agua potabilizada que se pierde antes de llegar a los usuarios. La iniciativa promueve la realización de contratos remunerados por desempeño “que no le costarían dinero adicional a OSE, pues las empresas se cobrarían con el ahorro que realizaría la empresa pública”, dijo a EL TELEGRAFO Olivera.
En la exposición de motivos, Olivera indica que OSE pierde más del 50% del agua que potabiliza, unos 170 millones de metros cúbicos, de los cuales 120 millones de metros cúbicos son por pérdidas físicas y 50 millones de metros cúbicos por pérdidas comerciales (errores de medidores, fraudes, etcétera).
“Con esta disposición se propone que el ente estaría en condiciones de contratar en forma excepcional con empresas privadas que generen la inversión necesaria -estimadas por OSE en 200 millones de dólares- para alcanzar la meta trazada, las que se cobrarían con los ahorros generados por el Ente y el aumento de la facturación como consecuencia de las acciones desarrolladas”, explicó el diputado por Paysandú.
Concretamente el proyecto de ley propone agregar “al literal C) del artículo 33 del Texto Ordenado de Contabilidad y Administración Financiera del Estado (Tocaf) conforme lo dispuesto el Artículo 482 de la Ley 15.903 de 10 de noviembre de 1987 y sus modificativas” un numeral.
En este, que sería el número 37, se detalla que “los contratos que celebre la OSE bajo la modalidad de contratos remunerados por desempeño en los cuales la inversión sea financiada íntegra o parcialmente por el cocontratante y estén destinados al mejoramiento de la red de distribución y abastecimiento de agua potable con la finalidad de disminuir los porcentajes de agua no contabilizada”.
Olivera agregó, citando a expertos, que “la disminución de pérdidas de agua potabilizada es la forma más eficaz para que las empresas que tienen a su cargo el abastecimiento sean más eficientes, generen mayores ingresos y aumenten el suministro de agua potable”.
Su propuesta se basa en el hecho de que OSE “ha fijado como objetivo deseable alcanzar la meta del 70% de agua contabilizada (agua facturada sobre el agua producida o elevada) y, según datos aportados por su presidente, lograr dicho objetivo permitiría un ahorro de los costos variables de producción y un mayor ingreso por facturación, que se estiman en 27 millones de dólares anuales”.
“La modalidad de contratos remunerados por desempeño permitirá introducir una herramienta útil para reducir el agua potable no contabilizada a partir de la reparación o sustitución de la red de distribución y de medidores”, explicó Olivera. Y agregó que “con esta disposición que se propone, el ente estaría en condiciones de contratar en forma excepcional con empresas privadas que generen la inversión necesaria para alcanzar la meta trazada, las que se cobrarían con los ahorros generados por el ente y el aumento de la facturación como consecuencia de las acciones desarrolladas”.
OSE solamente está en condiciones de invertir 25 millones de dólares, que “solo he ha permitido controlar el índice de aguas no contabilizadas”.
Y recordó que “en Paysandú, durante la anterior administración, hicimos algo parecido con el recambio de la luminaria a led. La empresa se cobró con el ahorro que le generó a la Intendencia”.
En lo que refiere al agua potable, a escala mundial, más del 40% no se registra en los sistemas urbanos de agua antes de llegar al consumidor (Global Water Market, 2011), porcentaje que según el Banco Mundial supera el 45% en América Latina, “y que en última instancia implica que los costos asociados con estas pérdidas sean finalmente trasladados a los usuarios y contribuyentes”, concluyó Olivera.