Locales | 11 Sep Informes extraoficiales en poder del diputado Walter Verri, en el sentido que las plantas de cemento portland de Nuevo Paysandú y Minas estarían embolsando el cemento aún en stock, que estaría próximo a terminarse, motiva un llamado a comisión de Diputados a la ministra de Industria, Energía y Minería.
“Queremos que se nos den las explicaciones que correspondan y convocamos” a la ministra Carolina Cosse “porque deseamos conocer la verdadera situación que se vive en las plantas de cemento portland de Paysandú y Minas”, administradas por Cementos del Plata, subsidiaria de Ancap, dijo Verri a EL TELEGRAFO. El diputado por Paysandú solicitó que Cosse comparezca ante la Comisión de Industria y Energía de la Cámara de Representantes acompañada por la presidenta de Ancap, Marta Jara.
“Se nos informa que Ancap en el futuro cercano estará comprando portland a su competidora” Cementos Artigas, que en 2015 tuvo ganancias por 25 millones de dólares mientras Cementos del Plata perdió 27 millones de dólares.
Por otra parte, “la preocupación aumenta porque hace pocas horas Cosse dijo que seguramente algunas subsidiarias de Ancap deberán cerrar. La planta de cemento no es rentable, pero seguramente por un manejo totalmente ineficiente”, agregó Verri.
“Y mucho antes que pensar en un cierre, queremos que el Estado promueva una administración eficiente, porque claramente es un buen negocio el cemento portland. La ministra y la presidenta de Ancap tienen que dar las explicaciones”. Subrayó Verri que “esto es especialmente importante cuando Ancap tiene pérdidas acumuladas de 200 millones de dólares y se estima que este año se agregarán otros 30 millones de dólares más”.
La situación “involucra directamente a Paysandú, donde está la planta de ALUR y una de las plantas de cemento. El aporte de Ancap, para bien o para mal, afecta directamente a Paysandú y esa es la razón de nuestra principal preocupación”.
La planta de cemento en Paysandú fue instalada en 1978, la segunda en el país después de inaugurar la de Minas, en 1956. El primer horno instalado producía 250.000 toneladas de cemento por año. En 2008 el horno se recicló y luego se invirtió en un segundo horno que elevó la capacidad a 600.000 toneladas anuales. En 2014 Ancap volvió a invertir en la planta 55 millones de dólares y cambió el sistema de abastecimiento de energía, pasando del fueloil a carbón de coque y también construyó un molino. Ancap se embarcó en nuevas inversiones poco después con la compra de un tercer horno para la planta de Paysandú que comenzaría a construirse en 2015 y que triplicaría la producción. Aún no se ha instalado este tercer horno.
El 27 de mayo pasado, la Junta Departamental se hizo eco del reclamo del sindicato de Ancap que alertó sobre las dificultades de Cementos del Plata --subsidiaria de Ancap--, subrayando que solamente funciona la planta 200 días al año y declaró de interés departamental la instalación del tercer horno de cemento. Además, advirtió “su preocupación por el deterioro que se constata en la maquinaria comprada y depositada para terminar la tercera línea en Paysandú”.
Asimismo, el año pasado una comisión investigadora creada en el Senado dejó al descubierto la situación deficitaria de la empresa estatal.