Locales | 03 Oct Hoy comienza la experiencia piloto que tiene por objetivo reducir el transporte de niños pequeños que concurren a centros CAIF en moto. El viernes, la Dirección de Tránsito y Transporte de la Intendencia procedió a la entrega de cuponeras de boletos de transporte urbano “a cincuenta padres del CAIF Centro”, confirmó a EL TELEGRAFO Federico Álvarez Petraglia, director en ejercicio del área. Esa cantidad “es prácticamente todos los padres de ese centro que transportaban a sus hijos en moto, por lo que la convocatoria oportunamente realizada tuvo una excelente aceptación”, agregó.
A cada padre se le entregaron 80 boletos para usar con la empresa Copay, a razón de 20 por semana. Se calculan cinco viajes para llevar al hijo, cinco para retornar al hogar, otros tantos para volver al centro a retirar al niño e igualmente otros cinco para el retorno final a la vivienda. En total, se entregan 4.000 boletos por mes y pueden ser utilizados entre las 7 y 18 horas. La Intendencia paga a Copay 16 pesos por boleto --precio subsidiado por la empresa--, lo que implica una inversión mensual de 64.000 pesos, algo más de 2.000 dólares. “En dos semanas nos reuniremos nuevamente con los padres, para apreciar cómo avanza la experiencia, si hay que ajustar algún horario con Copay, si es necesario alguna unidad adicional en determinada línea por la demanda”, comentó Álvarez Petraglia.
El secretario general de la Intendencia, Mario Díaz, quien acompañó a Álvarez Petraglia y al director de Movilidad Urbana Eduardo García al centro CAIF ubicado frente a plaza Constitución, indicó que “nos pareció interesante y novedoso proponer una iniciativa en el CAIF Centro, que implica que a aquellos padres que dejen su moto particular en su casa y trasladen a sus hijos en el transporte colectivo la Intendencia les subsidia el boleto”. Si la experiencia resulta positiva, “el año que viene buscaremos expandirla al resto de los centros CAIF de la ciudad, lo que seguramente motivará otro acuerdo con Copay, en lo que refiere al costo que deba pagar la Intendencia, a las frecuencias, al recorrido y a la cantidad de unidades en los horarios de entrada y salida de los niños”, resumió Álvarez Petraglia.