Locales | 04 Oct La Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) constató la mortandand de Limnoperna fortunei (mejillón dorado) en la desembocadura del arroyo Porrúa, en el departamento de Soriano.
El mejillón dorado es una especie de molusco bivalvo de agua dulce nativa de los ríos y estuarios del sudeste de Asia y se introdujo en la zona de la Cuenca del Plata a principios de 1990, muy probablemente a través del estuario Río de la Plata por medio del agua de lastre de los buques procedentes de aquel continente. Con los años ha colonizado prácticamente toda la cuenca hidrográfica Río de la Plata, que se extiende hasta Paraguay, Brasil, Uruguay y Bolivia, convirtiéndose rápidamente en el único organismo dominante sobre sustratos duros.
La presencia del mejillón dorado es muy dañina, al reducir la biomasa de fitoplancton y suprimir las poblaciones de zooplancton, dejando fuera de competencia por el alimento disponible a las especies nativas, aumentar las tasas de sedimentación y alterar el ciclo de nutrientes. Tiene el potencial de afectar la diversidad de las comunidades nativas de moluscos (por ejemplo, puede crecer demasiado y matarlas).
Si bien la boga ha cambiado su dieta predando el mejillón dorado, no es un factor limitante para su dispersión, indican los estudios. En el caso de la zona del arroyo Porrúa, CARU indica que los parámetros físicos y químicos medidos in situ y analizados en laboratorio no muestran ningún indicio de anomalía en relación con la calidad del agua en el momento del relevamiento.
Llama la atención la acumulación de este tipo de organismos en la costa, debido a que viven formando colonias adheridos a sustratos duros de los que no se desprenden fácilmente, por lo que podría sospecharse de alguna acción mecánica por la que fueron removidos o que facilitó ese desprendimiento.