Locales | 04 Oct El edil nacionalista Alejandro Colacce planteó en la Junta Departamental que se solicite a Mevir un programa de viviendas en los mismo centros existentes con prioridad para hijos de familias que ya habitan allí. Sostuvo que esto permitirá “mantener el vínculo de los jóvenes con el medio rural, apostando a la integración de los nuevos núcleos familiares a esas comunidades. También que Mevir se haga cargo de los costos y trámites que implican la habilitación de Bomberos para los salones comunales para acontecimientos sociales a efectos que puedan seguir siendo usado
s con fines recreativos e integradores de la sociedad”.
En sus argumentaciones recordó que “a pesar de los años de bonanza que vivió Uruguay a consecuencia del alto valor de los productos agropecuarios, las políticas sociales no han logrado detener la migración de la gente desde el campo a la ciudad. Para que tomemos dimensión del tema, solo entre 2009 y 2013, según datos del INE, la población rural bajó un 10%, pasando de 210.000 personas a unos 190.000. Necesitamos detener este proceso, no solo por lo que esto significa para el medio rural, sino por lo que implica para los centros urbanos. El desarrollo de Mevir, Movimiento de Erradicación de la Vivienda Insalubre Rural, ha permitido que muchas familias mejoraran su condición y por ende mantuvieran su actividad económica y social vinculada al campo”.
Afirmó que “actualmente Mevir realiza sus planes para un conjunto de familias en una zona, no tomando en cuenta que con el paso del tiempo esas familias que ingresaron con hijos menores ven que ellos crecen y necesitan independizarse. Es en este punto donde entendemos que Mevir debe abrir una línea de trabajo que permita a las nuevas familias que se generan dentro de sus núcleos habitacionales, mantenerse en el lugar y no verse obligados a emigrar hacia la ciudad por no tener una solución de vivienda. Es decir, que en la actualidad nos enfrentamos a dos situaciones --añadió-- que no favorecen esos objetivos. Por un lado, está el crecimiento de los hijos de familias que viven en Mevir y, por otro, la puesta en marcha de reglamentaciones de seguridad de carácter nacional ha conspirado contra el desarrollo de actividades sociales en los salones comunales por el costo y los trámites para la habilitación de Bomberos. En la actualidad algunos salones se han dejado de usar por lo engorroso y costoso de estos trámites”.