Rurales | 12 Oct “Fue un remate difícil porque faltaron compradores”. La sensación de Guzmán Tellechea, uno de los principales de las cabañas que vendieron sus toradas ayer en el establecimiento “Rincón de Francia”, refleja la situación originada durante la tarde, cuando en una hora se vendieron 35 toros a un promedio de U$S 2.572.
Fue el tradicional remate de las cabañas “Rincón de Francia” de la familia Zabaleta Stirling, “Manguera Azul” de Guzmán Tellechea y “La Chiquita” de Artigas Anselmi, a cargo de las firmas Héctor Indarte Negocios Rurales y Romualdo Rodríguez, con administración de Banco de la República. El comienzo fue con un mercado muy selectivo, siendo un integrante del primer lote de “Rincón de Francia” el que obtuvo el precio máximo de la subasta, al pagar Marianella Merello U$S 4.200.
De ahí en más salieron algunos lotes por la primera oferta y el precio mínimo del remate que fue U$S 2.160 –se vendía la cuota en 12 meses--. Aunque también, al ofrecerse los toros a ese precio la demanda no actuaba.
Por cabañas, “Rincón de Francia” colocó 20 toros entre U$S 4.200 y U$S 2.160, promedio U$S 2.676. “Manguera Azul” vendió 14 toros entre 3.600 y 2.160, promedio U$S 2.454. “La Chiquita” un toro en U$S 2.160. En total fueron 35 toros a un promedio de U$S 2.572.
Finalizado el remate, Tellechea señaló que “de estos 17 remates que llevamos, no recuerdo ninguno tan trancado como éste. No hubo puja y se vendieron muchos toros por la primera oferta, y faltaron compradores”, dijo.
Para el productor, fue de los remates “más bajos que hemos realizado. Son esas cosas que sorprenden porque es de los mejores años del estado de la torada”. Los compradores “pudieron elegir a precios sin competencias, por lo que prácticamente fue muy difícil observar puja”.
Expresó que en la Exposición de Guichón “pasó algo parecido, quedando la mitad de la torada, y acá fue similar y quedaban los toros en la primera oferta”. Entiende que está faltando agua “pero tampoco hay seca, y aunque las vacas están algo atrasadas, nos faltaron compradores, que en otros años no nos había pasado”.
Romualdo Rodríguez no se mostró conforme, “sobraron toros y los precios fueron muy moderados, salvo algunos precios de punta que fueron entre 350 y 360 dólares la cuota, pero sobraron alrededor del 50%”.
Agregó que aunque la torada estaba “muy buena, faltaron compradores”. Para el responsable de conducir las ventas, “el clima está influyendo, pero no le vamos a echar la culpa al tiempo. Faltaron compradores tradicionales que habían prometido acompañarnos, y el remate se dio así”, precisó.