Deportes | 03 Nov El primer paso está dado con la vieja terminal de ómnibus: UTU utilizará el primer piso para el alumnado del Bachillerato de Deportes y Recreación a partir de marzo.
El proyecto planteado por la Secretaría Nacional de Deportes y la Intendencia para la utilización del edificio a los efectos de transformarlo en un polo educativo y deportivo, que estaba claro iría por fases.
Primero, la comuna optó por trasladar las oficinas de Descentralización y Tránsito para el lugar, a los efectos de que estuviera ocupado. Y luego era cuestión de esperar por el resto de los socios del proyecto (Primaria, Secundaria, la Universidad y demás actores involucrados).
El primer socio ya quedó confirmado: UTU construirá en la planta alta de la terminal unas ocho aulas, así como un pequeño auditorio, a los efectos de que unos 300 alumnos del Bachillerato de Deportes puedan iniciar en marzo próximo las clases en el lugar.
Así quedó definido tras la visita del presidente del Codicen, Wilson Netto, que llegó acompañado por los arquitectos que evaluaron posibilidades junto a los profesionales de la Intendencia.
“Este es el primer paso, y se dio rapidísimo. Había estado con Netto la semana anterior en Montevideo intentando ajustar esto, y era clave que llegara con los arquitectos. Intercambiamos ideas, acordamos y marcamos fecha de inicio de las clases en marzo del próximo año”, explicó el intendente Guillermo Caraballo a EL TELEGRAFO.
El intendente dejó en claro que “esta es una primera fase” del ambicioso proyecto. “Primero irán las Direcciones de Descentralización y Tránsito, para lo que solo quedan algunos ajustes administrativos. En la primera etapa estarán arriba, pero la idea es hacer una pequeña construcción para tener un ingreso por calle Zorrilla. Y luego se habilitará la UTU, van a convivir ambos espacios. Pero lo más importante era dar este primer paso, ya que se habla de una matrícula de unos 300 alumnos”, que comenzarán a cursar a partir de marzo en la vieja terminal.
La recorrida del intendente y Netto por el lugar, acompañados por los arquitectos de ambos organismos, permitió delinear dónde se ubicarían las ocho aulas y el auditorio, de cuyas obras se encargará el Codicen. “Estamos hablando de un socio que es rápido en la ejecución, y que se encargará de la construcción de los salones y demás”, afirmó Caraballo.
El proyecto de conformar en la vieja terminal ese polo educativo y deportivo, que incluirá con el tiempo a la Plaza de Deportes, donde la SND estudia la construcción de un gimnasio y la pista sintética de atletismo, ya dio su primer paso. Y, seguramente, esto permitirá contagiar a los diferentes actores que están inmersos en el mismo.