Policiales | 03 Dic La Justicia dispuso el procesamiento de un hombre de 38 años, poseedor de antecedentes penales, luego de haberse establecido que pretendió herir a un vecino porque éste no le dio dinero, a la vez que profirió amenazas de muerte contra toda su familia.
En base a datos extraoficiales obtenidos por EL TELEGRAFO, pasadas las 19 del jueves a través de la línea de emergencia 911 se solicitó de manera urgente la presencia de la Policía en las inmediaciones de Pinilla y 25 de Mayo, puesto que un sujeto estaba corriendo a un hombre con un cuchillo en su mano mientras gritaba que lo mataría. Con la premura que el caso requería, efectivos de la Seccional Segunda se dirigieron hacia la zona y lograron arribar cuando el hombre aún corría a su vecino, logrando aprehenderlo a la altura de Pinilla y Colón, a pesar de su resistencia.
Una vez consultado el denunciante, un hombre de 34 años, comerciante del barrio, expresó que el atacante concurría diariamente a su carnicería y le pedía dinero. Indicó a los uniformados que esta vez se hallaba dentro de su negocio cuando el hombre ingresó y le pidió plata. Le respondió que no le daría y éste se retiró sin problemas.
A los pocos minutos el hombre retornó y le dijo que saliera de la carnicería porque quería hablar con él. El denunciante accedió y cuando llegó a la vereda, vio que el sujeto extrajo una cuchilla de unos 40 centímetros de hoja y pretendió asestarle una puñalada a la altura del abdomen. El iracundo no logró su cometido y como el carnicero dio un salto hacia atrás y quiso alejarse, comenzó a correrlo por 25 de Mayo al Este, empuñando la cuchilla.
En medio del desespero, la cajera del comercio --testigo involuntaria del episodio-- gritó pidiendo ayuda y llamó de inmediato a la Policía. Asimismo, un empleado que estaba en la cámara cuando el sujeto --identificado como Oscar Raúl Taramasco Díaz-- arribó por segunda vez a la puerta, salió en procura de alcanzarlo, pero no lo logró.
El arribo de los efectivos de la Seccional Segunda fue vital para evitar que la situación pasara a mayores.
Envalentonado y --según otros testigos-- fuera de sí, Taramasco corrió al comerciante por alrededor de la cuadra, a la vez que le gritaba incesantemente: “¡Te voy a matar!” Asimismo, el agresor amplió su amenaza y le dijo al hombre que si se atrevía a denunciarlo: “¡Voy a matarte a vos, a tu mujer y a tus hijos!”
Ya detenido, Taramasco Díaz fue llevado al Hospital Escuela del Litoral para el examen de rutina --como a todos los detenidos--, pero se negó a ser examinado por la doctora de turno. Por su parte, la Policía le efectuó la prueba de alcoholimetría, que arrojó 11,1 decigramos de alcohol por litro de sangre. Posteriormente fue derivado a una celda hasta que pudiera ser conducido ante la Justicia.
Finalizada la instancia en la órbita penal, luego de tomar declaración al detenido, el denunciante y los testigos, la juez de Cuarto Turno doctora Elsa Montín dispuso el procesamiento y prisión de Oscar Raúl Taramasco Díaz por un delito de homicidio en grado de tentativa.