Locales | 15 Ene Con la inauguración de Covitru y Covimad se completaron las habilitaciones de las cooperativas de viviendas que conforman el Complejo Bulevar --junto a Covinorte y Covicur--, en Bulevar Artigas entre Instrucciones del Año XIII y Purificación, que totalizan 156 casas.
El secretario general de la Mesa Departamental de la Federación Uruguaya de Cooperativas de Viviendas por Ayuda Mutua (Fucvam), Julio Retamoza, señaló a EL TELEGRAFO que “se cumplen 10 años del comienzo de las acciones, cuando las autoridades de la mesa de aquel entonces pidieron un terreno para la construcción de cooperativas a la administración de Julio Pintos”.
Con la oferta de terreno donde actualmente se emplaza el complejo, el directivo recordó los actos por “los sin techo” efectuados en el barrio, “con la presencia de los vecinos que no entendían lo que pasaba y así tomamos este terreno simbólicamente”. Tras la integración de los cuatro grupos, “siguió un arduo trabajo con luchas y reclamos en las administraciones de Pintos y Bentos que se extendieron por 10 años”, al tiempo que resaltó “la experiencia nueva para nosotros con la instalación de cuatro cooperativas juntas en un solo padrón”.
Antes del acto protocolar, corte de cinta, entrega de llaves y oratoria a cargo de las autoridades presentes, se realizó el habitual recorrido de la antorcha que transportan niños cooperativistas por barrios de la zona, organizados por los dirigentes William Guerrero y Melina Cabillón de la Comisión de Educación, Fomento e Integración Cooperativa (Cefic).

EN 2017
Retamoza informó que este año comenzará con movilizaciones en Paysandú el 26 de febrero “y por esos días también inauguraremos la primera cooperativa de 2017 que es Covicom, en Vizconde de Mauá y Nº 7, mientras esperamos el desenlace que tendrán los acuerdos, a raíz de la firma de los convenios para que la Intendencia compre el terreno de la antigua Paylana y hacer un llamado abierto a todos los interesados, pero particularmente gente joven”.
Fucvam tiene cuatro cooperativas en construcción, otras cinco en formación y trámite, además de la cooperativa Coviñe que salió sorteada en la última instancia establecida por el ministerio de Vivienda y comenzará su construcción este año.

COVIMAD Y COVITRU
El referente de Covimad, Mauricio Echartea, recordó que las obras de construcción comenzaron en noviembre de 2013 y se extendieron hasta diciembre de 2016, tras su creación el 3 de febrero de 2007 a instancias de un grupo de trabajadores de aserraderos. “Fueron tres años de obra sin parar, en los que los cooperativistas –además de sus trabajos y familias-- tuvieron que cumplir con cuatro horas diarias. A lo largo de diez años, pasamos buenos momentos y otros difíciles, pero gracias al esfuerzo llegamos al día de hoy”, precisó. En ese lapso, reconoció las luchas “para conseguir el terreno que era propiedad de ANEP y después pasó a la Intendencia, que lo vendió a los cooperativistas. Posteriormente tuvimos el problema del saneamiento, porque al medio de nuestra cooperativa corría un desagüe cloacal, por eso nos juntamos las cuatro cooperativas para coordinar con la Intendencia , hacer un entubamiento y el desvío de ese desagüe”.
Asimismo, debieron construir “un saneamiento paralelo que significó mucho gasto y lo afrontamos con beneficios, sin tocar la plata del préstamo. Fue un gran esfuerzo de inversión en tiempo y dinero”, consignó. Los cooperativistas recibieron la habilitación del ministerio y la Agencia Nacional de Vivienda para residir en el barrio, constituido por 30 casas, desde diciembre.
Covitru, que cuenta con 44 casas, surgió desde un grupo de operarios que formaban parte del programa “Uruguay Trabaja” del Ministerio de Desarrollo Social. Patricia Cáceres sostuvo que tanto como Covimad, trabajaron arduamente en la construcción de un saneamiento que solucionara la problemática de los pluviales en un núcleo habitacional que en su mayoría se compone por mujeres jefas de hogar.
“Es un sueño cumplido por muchas mujeres jefas de hogar o madres solteras para llegar hasta acá. Incluso hubo otras que perdieron sus trabajos para construir su casa”, recordó. Cáceres añadió que realizan “las gestiones para obtener los subsidios correspondientes ante los muy bajos salarios que ganan los cooperativistas de Covitru, incluso tenemos gente sin trabajo”, concluyó.