Locales | 11 Mar Con un acto protocolar, con desfile, orquesta e himno, y con la presencia de representantes nacionales y departamentales, figuras y oficiales militares, y autoridades extranjeras, se celebró ayer el 110 aniversario del Batallón “General Leandro Gómez” de Infantería Mecanizada Nº 8.
A casi un mes de haber asumido, el comandante del Batallón, el teniente coronel Isidro Nieto, hizo un repaso histórico de la “prestigiosa unidad” que lo tiene como número uno. En su discurso, aseguró que nació en los años posteriores a la guerra civil de 1904, en el marco de una “importante” reorganización y modernización del ejército. “Un 26 de febrero de 1907 por la orden general 232 se creaba la compañía de infantería Nº 5 en la ciudad de Minas”, indicó.
“Este acontecimiento marcó entonces el nacimiento de nuestra unidad, la que partir de ese momento y de acuerdo a las necesidades, en las diferentes etapas de nuestra historia ocupó distintas guarniciones y nominaciones, en el pueblo Batlle y Ordóñez, Santa Clara de Olimar, Melo, Fray Bentos, para finalmente el 18 de mayo de 1925 el Batallón de Infantería Nº 13, como se denominaba en ese momento, fue trasladado definitivamente a la ciudad de Paysandú”, explicó Nieto.
En 1939, la unidad adoptó el Nº 8 en su denominación –el número actual–, a raíz de una reorganización del ejército, “trayendo aparejado la regimentación de la infantería y, por ende, la dependencia del Batallón de Ingeniería Nº 3”. En tanto, el 28 de noviembre de 1976, el Batallón pasó a llamarse “General Leandro Gómez” de Infantería.
De esta manera, se reconoce “de forma perpetua al jefe defensor de la Heroica Paysandú. Un fervoroso seguidor de Artigas que entregó su vida defendiendo la guarnición como comandante de la patria y de las instituciones, y de quien hoy nos enorgullecemos de ser los fervientes custodios de sus restos”, subrayó el teniente coronel.
En 1995 se da la última denominación y se le agrega lo de mecanizada. “Esto marca un proceso dinámico y de transformación, que termina en una moderna unidad mecanizada”, aseveró el jefe del Batallón. “En Paysandú son 92 años, tiempo en que se han establecido sólidos vínculos con la sociedad sanducera, donde hoy nos sentimos totalmente integrados por la mutua colaboración”.

Misiones de paz
Luego de este punteo histórico, Nieto destacó que su personal –unos 250 efectivos– son “motivo de orgullo” y para él ha representado “el más alto honor” haber sido designado jefe. El teniente coronel también hizo referencia a las misiones de paz que el país tiene desplegados en zonas como el Sinaí y la República Democrática del Congo.
“Desde aquí nuestro saludo y el reconocimiento permanente. De igual manera, para aquel personal que se encuentra próximo a desplegarse, que está en esa situación por capacidad y alto nivel de profesionalismo”, dijo en referencia a que próximamente, entre abril y mayo, habrá un relevo en el contingente uruguayo de las misiones de paz de la ONU.
Estas iniciativas forman parte de una “política exterior de Estado, donde se deja atrás a la familia y seres queridos, para defender la vulnerabilidad de vidas civiles en tierras lejanas, llenando de orgullo a nuestro batallón, al ejército en general y al país en su conjunto”.
Nieto no quiso olvidarse de las tareas que se han cumplido de manera “satisfactoria” en Cerro Carancho, en el Instituto Nacional de Rehabilitación en Canelones y en el Sistema Nacional de Emergencias, donde se ha trabajado “en conjunto con las autoridades nacionales y departamentales, así como con organismos públicos y privados”.