Policiales | 19 May Un procedimiento realizado por el Departamento de Seguridad Rural (antigua Bepra) de la policía sanducera permitió establecer el destino de varios animales en pie que habían sido hurtados en la chacra policial, ubicada al sureste de la ciudad, en las cercanías de la antigua cárcel departamental.
De acuerdo con información recabada por EL TELEGRAFO, la investigación, que incluyó a un empresario del rubro transporte de carga, derivó en que se pidiera la citación a declarar de varios funcionarios --policiales y civiles-- que cumplen funciones en la unidad local del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), a fin de esclarecer el hecho.
La maniobra descubierta pone nuevamente en tela de juicio el rol de quienes están abocados a tareas de rehabilitación de reclusos, ya que se da a cuatro meses de la denuncia sobre posibles irregularidades que involucraron (en diciembre pasado) al economato del centro, la arbitrariedad en la adjudicación de las comisiones por trabajos realizados por personas privadas de libertad, la salida --sin permiso judicial-- de internos fuera de la unidad y determinaron el cambio de director.
En la víspera, al menos una docena de personas fueron conducidos a la sede penal a declarar. Las actuaciones continuarán hoy.
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