Paysandú, Lunes 05 de Junio de 2017
Locales | 06 Jul Una reunión “clave” está prevista para primera hora de esta tarde en la Dirección Nacional de Industrias, donde representantes de prácticamente todas las instituciones que tienen que ver con Tessamérica y la Cooperativa de Trabajadores de Paylana (Cotrapay) analizarán la viabilidad del proyecto bajo nuevas miradas, buscando “reformar el modelo de negocio para mejorar la sustentabilidad”, según anunció a EL TELEGRAFO la asesora de la cooperativa, ingeniera química Silvia Belvisi. Mientras que hoy podría resolverse el pasaje al seguro de desempleo “de 130 o 140 compañeros”, afirmó el directivo Miguel Sabaño, lo que dependerá de las decisiones que tomarán hoy los responsables de los sectores de producción y comercial teniendo en cuenta los pedidos de telas que están pendientes.
Sobre las acciones en Montevideo, Belvisi detalló que la reunión comenzará a las 13.30 y participarán el director Nacional de Industrias, Enrique Moreno, y representantes de Inacoop, Fondes, los ministerios de Trabajo y de Economía y Finanzas, y de la Intendencia de Paysandú, los diputados Daniel Placeres y Cecilia Bottino, integrantes de Cotrapay como la presidenta María Irisarri, Miguel Sabaño y la contadora María Inés García, además de Belvisi.
El objetivo de la reunión es “redefinir y reestructurar un plan de negocios nuevo, buscando que sea viable, dándole continuidad”, dijo la asesora, quien detalló que “eso es fundamental, porque hubo casos en que ellos conseguían clientes pero no podían mantener una continuidad por las demoras en acceder al capital de giro, lo que trancaba la producción”.
Por otra parte, “buscan concretar una vieja aspiración, que está en los papeles hace años, que es compartir el predio para abatir los gastos fijos”. Y que eso se podría hacer “ofreciendo lugares para industrias más chicas para bajar los gastos fijos, porque el tamaño del predio y su mantenimiento no es acorde al tamaño real que necesita Tessamérica, y en lugar de disponer de un espacio para 700 u 800 trabajadores como era antes, disponer para los 170 que hay”.
ESTABA EN EL PROYECTO
Según explicó Belvisi, “en el proyecto original, que nosotros escribimos hace dos años, ya estaba previsto, pero por distintas situaciones no se ejecutó”. Sobre si ya hay alguna cooperativa o pequeña empresa industrial aspirante para trabajar en el predio que hoy ocupa solamente Cotrapay, Belvisi afirmó que “la idea original --que se había hablado con el entonces ministro Roberto Kreimerman-- era hacer cadenas de valor, como lo planteaba el propio ministerio. Era el concepto de quien quiere dejar de ser pastor de ovejas debe esquilar la lana, procesar el top, hacer el hilado y tener la cadena lo más armada y aceitada posible”.
La asesora recordó que “eso fue lo que le resultó lógico a los prohombres que en el año 1940 empezaron a poner las plantas para industrializar, porque veían que de otra manera iban a obtener peores precios. En base a esto, Kreimerman nos decía que en la crisis textil hay un hueco, aunque sea chico, como para dejar el conocimiento de manera de no perder algo que, si bien hoy China está haciendo casi monopólicamente, en algún momento cuando los chinos empiecen a dedicarse más a la industria pesada, podrá volver a ser rentable”.
Sin embargo, lo que el grupo de Cotrapay también quiere confirmar es “si el nuevo gobierno mantiene ese planteo de Kreimerman, saber si la visión industrial del país es la misma”.
“De ser así, podríamos desarrollar ese nuevo polo, porque si de tener 800 empelados pasa a 170, es obvio que va a ser un 25% en lo que respecta al tamaño. Y hay que adecuarlo, disponer de la energía necesaria y no más, porque la energía, tanto en leña, electricidad o gas, es un costo muy importante que tiene Cotrapay. Y lo que se puede hacer es compartir los gastos fijos con otras industrias que precisen lugar y servicios, o hacer una inversión para hacer algo más chico en escala”.
CABEZA ENTRE TODOS
A juicio de la asesora, “esto es lo que vamos a hacer en la reunión, ver si poniendo cabeza entre todos encontramos una salida”. Por otra parte, y teniendo en vista que hay pedidos de telas que aún no se han cumplido, Belvisi dijo que “ellos tienen pedidos, y están pidiendo el dinero que habían quedado de entregar y no vino. Por otra parte, Inacoop dice que no lo van a entregar mientras no vean el panorama más claro, y la discusión es esa y pasa también por el aquí y el ahora”.
No obstante, aún no hay una agenda ni lista de posibles empresas cooperativas o no que pudieran integrarse al predio utilizado hoy solamente por Tessamérica, “porque tenemos la idea, pero no tenemos las condiciones concretas con las cuales nuevos emprendimientos podrían instalarse, aunque ahora hay alguna gente del Mides que están instalándose allí, ya que hay suficiente lugar”.
Según la ingeniera Belvisi, esto no solo repercutiría en la economía de Cotrapay, sino que “esto inyectaría otras actividades en Paysandú. No es solo tomar conciencia de no cerrar por los 170 puestos de trabajo que están en juego, sino que debe tomarse conciencia en que se puede seguir fomentando el desarrollo de puestos de trabajo en momentos en que Paysandú está complicado”.
IRÍAN AL SEGURO
Por otra parte, el directivo Miguel Sabaño anunció a EL TELEGRAFO que hoy, de acuerdo a las decisiones que se tomen en las gerencias de producción y comercial de Tessamérica, podría definirse que entre 130 o 140 trabajadores de Cotrapay pasen al seguro por desempleo, ya que se estarían terminando las posibilidades de desarrollar los pedidos que hay pendientes.
Sin embargo, esta decisión se tomará de acuerdo a “los tiempos de producción que sean necesarios, porque hay trabajo haciendo telas hasta mediados de agosto”. No obstante, habría 15 o 20 trabajadores que quedarían desempeñándose en la empresa, ya que la confección de telas es por etapas, y ya se estaría en las últimas. Todo esto fue analizado oportunamente en la asamblea realizada por los cooperativistas.
De todas maneras, Sabaño recordó que desde el inicio de las actividades de la cooperativa se vienen cumpliendo las “horas solidarias” u “horas responsables”, como se las denomina en el círculo cooperativo. Se trata de actividades que son cumplidas por trabajadores del emprendimiento en forma honoraria, y que los servicios de guardia en la portería de la planta, durante los fines de semana, se cumplen con este sistema de “horas responsables” y no cobradas.
Sabaño dijo que la gran mayoría de los trabajadores está en condiciones de pasar al seguro de desempleo, y que eventualmente habría tres o cuatro, los últimos en haber ingresado a la cooperativa, que no tendrían el tiempo de trabajo necesario, pero que en ese caso resolverían “la forma de apoyarlos”.
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