Primera | 23 Nov Tras doce años de poder kirchnerista, un nuevo espacio político llegará a la Casa Rosada el 10 de diciembre con Cambiemos, que se imponía en el primer balotaje de la historia argentina, con el 51,45% de los votos frente al 48,55% del candidato oficialista, Daniel Scioli, cuando se escrutaban el 98,39% de las mesas.
Pasadas las 22, Macri brindó su discurso, en medio de la euforia que se vivía en el búnker de Costa Salguero. “Le pido a Dios que me ilumine para poder ayudar a cada argentino a encontrar su forma de progresar. Yo estoy acá por ustedes, así que les pido por favor, no me abandonen, sigamos juntos”, manifestó.
Por su parte, en el búnker que el Frente Para la Victoria montó en el hotel NH Bolívar, Daniel Scioli saludó a su rival por vía telefónica y reconoció la derrota. “El pueblo ha elegido una alternativa, esperemos que Dios ilumine al ingeniero Macri para poder mejorar lo que el país ha avanzado, por el bien de todos”, dijo en un clima de calma.
De este modo, tras un extenso calendario electoral, Cambiemos gobernará la capital argentina, la provincia de Buenos Aires y la nación, al tiempo que enfrentará el desafío de conformar tres nuevas administraciones.
Macri resolvió que Marcos Peña será el jefe de Gabinete, Ernesto Sanz (por acuerdo con la UCR) será el ministro de Justicia y Emilio Monzó será el presidente de la cámara de Diputados.