Policiales | 06 Feb Personas afectadas por el intenso humo y otras con crisis nerviosas ante la situación que se vivía, fue el resultado del incendio ocurrido en el piso 11 del edificio Paytorre, ubicado en 33 Orientales y 18 de Julio, próximo a las 20.30 de la víspera.
Más de veinte personas fueron evacuadas por precaución ante la densa concentración de monóxido de carbono que inundó el acceso principal.
De acuerdo con información recabada por EL TELEGRAFO en el lugar del hecho, el foco se habría originado a raíz de un cortocircuito en un calefón, en la ropería de un apartamento donde funciona una peluquería. El propietario manifestó, a quienes se acercaron a asistirlo, que el incendio empezó cuando se estaba bañando. Al parecer, sintió un ruido y al salir notó que el calefón de la ropería estaba en llamas.
De inmediato tomó un pantalón y, como el humo concentrado dentro de su apartamento era intenso, atinó a tomar a sus dos perritas y solicitar ayuda, pidiendo a gritos que se llamara a los Bomberos.
A los pocos minutos, se podía ver como el humo negro salía desde dos ventanas contiguas en el edificio, llamando la atención y causando alarma entre los transeúntes por 18 de Julio.

EVACUACIÓN DEL EDIFICIO Y ATENCIÓN DE AFECTADOS
Al arribo de Bomberos se comenzó con las tareas de evacuación, sobre todo de aquellas personas que se encontraban próximas al piso 11, quienes debieron utilizar las escaleras, puesto que el personal especializado solicitó que no se usara el ascensor.
Uno de los policías del fuego dio la voz de mando y pidió que quienes aún estaban dentro del edificio avisaran a los demás vecinos que la orden era desalojar. Así, poco a poco los vecinos fueron saliendo, en su mayoría personas mayores de 70 años con dificultades para caminar, que eran los que se encontraban a esa hora en la edificación. Fueron asistidos por los efectivos que trabajaron en la zona, munidos con bastones y pañuelos cubriendo las vías respiratorias.
En tanto, una vecina, que se encontraba junto a su esposo sobre la vereda del edificio, sufrió una crisis nerviosa, debiéndose tramitar la presencia de una ambulancia, la cual arribó en unos 10 minutos. Una vez en el lugar, personal médico atendió a la señora dentro de la Unidad de Emergencia Móvil. Luego, también se atendió al propietario del apartamento siniestrado.
Paralelamente, Bomberos ayudó a salir a una joven que resultó afectada levemente por el humo, la cual se hallaba presa de los nervios debido a que en un momento pensó que su pequeño hijo estaba aún dentro del edificio. Al llegar a la vereda, notó que el niño estaba junto a otro familiar, por lo que en medio de llanto corrió a abrazarlo.
Al tornarse cada vez más intensa la humareda, Bomberos cambió las órdenes y pidió que quienes estuvieran dentro de los apartamentos no salieran, ya que podían resultar afectados por el monóxido de carbono, ocasión en que un matrimonio del piso 14 debió dirigirse a la terraza del edificio.
Los especialistas en la materia, dotados de máscaras de oxígeno, ascendieron para trabajar en el apartamento donde se había desatado el fuego. Finalmente lograron ayudar a salir a un matrimonio mayor que, si bien estaban unos pisos por debajo del 11, fueron trasladados en un móvil de la Unidad de Patrullaje y Respuesta hacia el servicio de Comepa, ya que el señor --de 85 años-- había inhalado gases propios del humo.
Cuando el humo se iba disipando, se permitió salir a las personas que aún estaban dentro del edificio --el que por tener más de 20 años de construcción no posee puertas cortafuego, exigencia en edificios nuevos--. Así, se instalaron sillas cedidas por una comerciante de la cuadra para que las personas con mayores dificultades pudieran descansar.
Además de Bomberos, que trabajó con el apoyo de dos autobombas, personal de la Seccional Primera y de la Unidad de Patrullaje y Respuesta se encargaron del despeje de zona, efectivizando los cortes de tránsito en 33 Orientales y Leandro Gómez, así como en 18 de Julio y Montevideo. Controlada la situación, la pericia técnica de Bomberos (primaria) habría establecido que el cortocircuito ocurrió en el enchufe del calefón, el que --al parecer-- no estaba calzado correctamente y produjo un falso contacto; afectando toallas y otros enseres que se encontraban en dicha área. Pasadas las 22.30, fueron habilitados los ascensores y se permitió el reingreso de los propietarios a sus apartamentos.