Locales | 30 Nov Desde este 1º de diciembre regirá un incremento del 10% en el precio del pan y sus derivados de acuerdo con lo dispuesto por empresarios de la Agrupación de Panaderos de Paysandú, que entienden que los costos han aumentado incesantemente desde el último reajuste en el sector. Los empresarios recordaron que en julio no se aplicó la suba a través del Centro de Industriales Panaderos del Uruguay por la particular situación económica de Paysandú.
Los empresarios Ruben Panissa, Marcelo Cámera y Francesco Giacomoni indicaron a EL TELEGRAFO que el reajuste se debe al frecuente incremento en los precios de los insumos del sector, que además sufre la competencia desleal de panaderías clandestinas que no son controladas por los organismos del Estado.
Consideran que el pan francés no puede venderse al mostrador a menos de 80 pesos el kilogramo, como ocurre en algunos lugares: “responden a emprendimientos en negro, desde que los costos son imposibles de absorber a un precio menor”. Denunciaron que los organismos solo controlan a las empresas inscriptas y que lo mismo ocurre con la Intendencia Departamental, “que no nos atiende”, cuando hay de por medio exigencias en contar con el carné de salud y manipulación de alimentos, mientras que hay muchas panaderías clandestinas “que trabajan sobre pisos de tierra” y sin observar elementales normas de higiene.

SITUACIÓN PROBLEMÁTICA
“A partir de este 1º de diciembre, tendremos vigente una suba del orden del 10% en el precio del pan. El gremio de panaderos de Montevideo dispuso que a partir de julio hubiera un aumento, pero en Paysandú ninguno de nosotros había subido los precios. Pero ya no aguantamos más porque los subproductos siguen aumentando --la manteca, la margarina, el dulce de leche, entre otros insumos, han subido varias veces--, paralelamente tenemos la competencia desleal de panaderías clandestinas”, precisaron. Acotaron que “el aumento del pan no puede ser menor al 10% y el pan francés tendría que estarse vendiendo a no menos de 80 pesos el kilo, al igual que otros productos como galletas y otros tipos de pan. Algunas incluso están por encima de este valor, pero muchas otras por debajo”.
“Incluso hay algunos colegas que han bajado el pan, que son aquellos que no pagan ningún tipo de impuestos, trabajan en negro, porque no los inspecciona el BPS ni ningún otro organismo, porque no figuran en los registros y los inspectores van solamente a los que tienen en la lista, porque así se manejan”, aseguraron.

“INCLUSO COLGADOS DE LA RED ELÉCTRICA”
“Quienes así trabajan tienen acceso a poder comprar los insumos sin tener RUC, sin tener una empresa inscripta, sin tener empleados inscriptos en el BPS. Hay quienes están colgados de la red eléctrica y contra eso no se puede competir en precios, porque los números no dan. Estamos indefensos ante este tipo de emprendimientos”, subrayaron. “Hacemos lo imposible por estar en regla, pero incluso a veces nos vienen a exigir cosas que no tienen nada que ver con lo que establecen las normas, mirando hasta lo más pequeño, cuando tienen ahí cerca a quienes no respetan hasta lo más elemental”, reclamaron los integrantes de la agrupación.
“A nosotros también nos piden que tengamos los permisos correspondientes para repartir en camioneta, pero vemos que andan repartiendo pan y productos de panadería en moto, en bicicleta, en carro, bajo lluvia y con mercadería al rayo del sol en el verano. Tenemos que tener habilitación del vehículo, pero para esos otros casos esto no corre ni nada que se parezca”, señalaron.
“Sin dudas hay mercadería ilegal, barata, que nos tira abajo las ventas. Hay panaderías que no dan más y ya hay panaderos que nos han indicado que mantendrán el personal hasta las fiestas de fin de año y que en el verano habrá envíos al Seguro por Desempleo. Sin ingresos es imposible mantener a todo el personal”, enfatizaron.