Locales | 06 Abr La crisis que atraviesa el sector forestal en nuestro país, como directa consecuencia de la caída de la demanda internacional, ha sido determinante para que se registre una merma del orden del 30 por ciento, como mínimo, en el volumen de transporte de la madera, lo que se agrega a una caída similar que se registra en el transporte internacional de cargas en Uruguay.
Ello es determinante para que se vuelquen al transporte de la cosecha de verano numerosas unidades de las gremiales de transportistas en procura de ir paliando los efectos de la merma en la demanda de transporte, pero existen fundadas dudas de que la cosecha no tendrá el volumen de otros años, con la contrapartida de que a la vez la cantidad de camiones sin carga en esta coyuntura haría que se pudiera atender la demanda de mayor movimiento en los períodos pico de levante de la cosecha, si es que esta se presenta normal.
Hasta el año anterior se registraron problemas en la recepción de los cultivos en los silos, lo que generó largas colas y esperas que provocaron malestar en los camioneros, cuando precisamente el momento pico urgía levantar la cosecha.
En esta oportunidad la crisis ha tenido como repercusión que haya un mayor número de unidades disponibles, con la contrapartida de dificultades económicas para los camioneros por la reducción de la actividad, lo que agrava el problema sobre todo en aquellos casos en que se está amortizando la compra de las unidades que fueron adquiridas para atender una demanda de cargas que actualmente no existe, de acuerdo a la información recogida por EL TELEGRAFO en esferas gremiales del sector.
En lo que refiere al transporte internacional de cargas, se mantiene una caída de entre el 30 y el 35 por ciento, debido a una reducción en el intercambio comercial regional, con escasas señales de recuperación por el momento.