SERÍA POR ACCIONES VANDALICAS

Locales | 14 May A más de dos años y medio de votados por los vecinos en el Presupuesto Participativo y con una inauguración que mostró la importancia asignada a la solución buscada -aunque duró poco-, el servicio de semáforos de avenida Roldán y Antonio Estefanell (ex número 9), sigue sin prestar el servicio que los propios habitantes de la zona entendían imprescindible, ahora por la desaparición de los soportes de los repetidores.
Es que primero el destrozo y luego el robo del controlador electrónico que estaba instalado bajo tierra en esa peligrosa esquina determinó que el semáforo dejara de funcionar hace meses. Oportunamente, tanto las autoridades municipales de Tránsito como el representante de la empresa instaladora dijeron que se estaba trabajando en mejorar la seguridad del equipamiento, mientras paralelamente se esperaba que AFE considerara favorablemente instalar los sensores que completarían la seguridad de peatones y vehículos, ya que paralelo a Roldán está la vía férrea que conduce a Nuevo Paysandú e interconecta con el Norte. En busca de un lugar seguro para el controlador, ninguno de los vecinos quiso responsabilizarse de tenerlo en su propia casa, y se decidió colocarlo en una de las propias columnas del sistema de semáforos, a una altura considerable como para que no pudiera ser nuevamente robado, o destrozado por actos de vandalismo.
En eso estuvo la empresa varias semanas, desarrollando un controlador electrónico aéreo para el cual hubo que buscar y comprar equipo especial.
SIN SOPORTES
El sistema lleva un doble juego de repetidores electrónicos, que son quienes disponen el encendido de las luces verde, amarilla y roja correspondientes uno a los semáforos que están sobre la esquina, a la altura de los peatones con un diámetro de 200 milímetros, y otro que prende o apaga las luces de las grandes lámparas de trecientos milímetros que se ven sobre la mitad de la calzada, en los pescantes y a cierta altura.
“Se retrasó porque estamos esperando unos soportes. No se sabe qué pasó, si también fueron rotos por los vándalos, pero los soportes de los repetidores no están”, explicó a EL TELEGRAFO Sergio Gregorio, de Elecom, la empresa responsable técnica de las instalaciones.
Detalló que estamos “esperando los soportes que sostienen los cabezales de los repetidores que solamente los tiene o los trae el importador, y todo está en trámites por parte de la Intendencia”. Gregorio dijo que “lo demás tenemos todo, el cable, la central y los caños”. Aclaró que el sistema igual podría funcionar, pero solo con los repetidores grandes, del pescante. “Eso sería un peligro, porque el peatón debería levantar la cabeza para ver la luz”.
También falta realizar, una vez que llegue el equipo faltante, la limpieza de las malezas y de las cámaras para hacer la instalación.
UNA ESQUINA PELIGROSA
Debe considerarse que es una esquina muy transitada por niños y mayores a pie -está la escuela del populoso barrio en esa esquina- y por múltiples autos, camiones y ómnibus por Roldán, tránsito complicado más aún por la interconexión vital que tiene el barrio Purificación 3, al Oeste de Roldán, y la “continuación” del barrio al Este, y en este tramo de Estefanell circulan muchos carros tirados por caballos. Esta razón fue el fundamento de los vecinos que propusieron en el Presupuesto Participativo de 2006 la inversión de varios miles de pesos en una obra que llevaría más tranquilidad a los padres de los niños que concurren a la escuela y deben cruzar esas arterias de tránsito.