Deportes | 10 Sep Ganó y punto. Conoció la victoria después de cuatro partidos sin sumar de a tres, justo horas después de haber recibido un duro cachetazo ante Perú, el último de la tabla, que le dio un empujón casi mortal a esta selección uruguaya de fútbol que se mantiene con respirador artificial en las eliminatorias. Uruguay debía ganar ante Colombia, y cumplió su objetivo. El equipo de Tabárez no se resigna a quedarse sin pasaje a Sudáfrica. La lógica dice que es prácticamente imposible alcanzar el objetivo, pero parece que el plantel está dispuesto a dar batalla y romper con los pronósticos, que indican que para Uruguay será más que complicado vencer a Ecuador de visita y a Argentina de local. Pero el primero de los tres triunfos que se necesitan para incluso poder quedar cuartos, se alcanzó y punto.
No sobró nada
La realidad es que no sobró nada. Y que tampoco el inicio del partido ante los colombianos pintó bien para los celestes. Es más, a los 32 segundos de juego se salvó de milagro el arco local, y apenas iban dos minutos cuando dos colombianos quedaron mano a mano con Diego Pérez, pero el línea terminó desactivando la peligrosa incidencia.
Estas dos jugadas puntuales ya dejaban en claro lo que sería el partido. Estaba claro que el negocio cafetero era ser cómplice del reloj y aprovechar la necesidad uruguaya, que se iría transformando en desesperación. Pero el gol convertido por Suárez a los 6 minutos, fue un bálsamo. Una gran definición del delantero, cruzando el remate desde el borde del área, le permitía a Uruguay comenzar a abrazar el objetivo.
Pero Uruguay fue el gol y poco más. Porque Colombia comenzó a afirmarse en la mitad de la cancha y Uruguay se dedicó más a querer entorpecer el juego rival que a generar su propio fútbol.
Lo cierto es que Colombia era algo más pero sin inquietar. Pero si ya se hacía complicado el partido, la expulsión de Valdez cuando apenas transcurrían 29’ terminaba de darle un manto de dramatismo al partido.
El técnico Oscar Tabárez resignó a Cavani para recomponer con Andrés Scotti la última línea. Y como se preveía los cafeteros dominaron sobre el final de la primera etapa, llegando en un par de ocasiones pero sin poder igualar el marcador.
Con ese panorama, estaba claro que el principal objetivo para el entretiempo era mantener la tranquilidad para trabajar lo que quedaba del partido con inteligencia. Más aun tenía que afirmarse la idea cuando apenas iniciado el complemento el árbitro expulsó a Teófilo Gutiérrez, nivelando la cantidad de jugadores en cancha.
Sin calma
Pero la calma que permitiera asegurar el trámite no apareció. Los fantasmas de la eliminación comenzaron a invadir el Centenario cuando un centro que debía ser controlado por Castillo terminaba con la pelota dentro del arco celeste. Y fue un baldazo de agua fría. Colombia jugaba con la pelota y los nervios de todo un estadio, que se benefició con la promoción del 2x1 y el regalo de entradas a las empresas auspiciantes de la selección para arrimar a algo más de 35.000 personas.
Pero los últimos 15 minutos del partido volcarían el trámite a las ganas celestes. Scotti se mantuvo en el aire para cabecear el balón ante centro de Pereira, y anotar así el segundo gol de Uruguay, desatando la locura del equipo, del banco de suplentes y de los hinchas.
Pero la verdadera tranquilidad llegó sobre el final mismo del partido, con la definición del recién ingresado Eguren que le permitió a Uruguay sacarse de encima al primer rival directo de los que deberá enfrentar en este tramo final de las eliminatorias.
La clasificación sigue siendo complicada. Pero los celestes siguen dependiendo de sí mismos, de ganarle en octubre a Ecuador y Argentina para colarse en el Repechaje, o logran la clasificación directa.
Increíblemente, Uruguay está en carrera. Con respirador y en el CTI, pero no se resigna y quiere seguir dando pelea.

URUGUAY 3 COLOMBIA 1
 Escenario: Estadio Centenario. Público: 35.000 personas. Arbitros: Carlos Torres, Nicolás Yegros y Emigdio Ruiz (paraguayos).
Uruguay: Juan Castillo; Bruno Silva, Carlos Valdez, Martín Cáceres, Alvaro Pereira; Diego Pérez, Walter Gargano; Edinson Cavani (Andrés Scotti, 32), Cristian Rodríguez (Sebastián Eguren, 81); Luis Suárez (Sebastián Abreu, 90) y Diego Forlán. DT: Oscar Tabárez.
Colombia: Agustín Julio; Amaranto Perea, Iván Ramiro Córdoba, Mario Yepes, Pablo Armero; Fredy Guarín, Abel Aguilar, John Viáfara (Jackson Martínez, 58), Adrián Ramos (Dorlan Pabón, 81); Giovanni Moreno (Giovanni Hernández, 58) y Teófilo Gutiérrez. DT: Eduardo Lara.
Goles: Luis Suárez (6), Jackson Martínez (64), Andrés Scotti (76), Sebastián Eguren (87).
Amonestados: Martín Cáceres, Diego Pérez, Bruno Silva.
Expulsados: Carlos Valdez (29), Teófilo Gutiérrez (46).

"EL EQUIPO NO SE CAYÓ NUNCA"
“Rescato el resultado y el compromiso que se tuvo ante este desafío. Más allá de los malos momentos que pasamos, el equipo no se cayó nunca y se contó con chances de dar vuelta las cosas. Eso me tiene muy satisfecho”, dijo el técnico celeste, Oscar Tabárez, a minutos de haber finalizado el partido ante Colombia.
“Lo más complicado tras la derrota ante Perú fue enfrentar esta situación real, porque habíamos dicho que teníamos que ganar cuatro partidos para seguir dependiendo de nosotros, y se perdía el primero. Pero el resultado que había conseguido nuestro derrotado de hoy nos puso en la situación de tener que ganar los tres partidos que teníamos por delante. Es decir que la situación era la misma y a Colombia teníamos que ganarle. Ese era el panorama realista, y después teníamos que hacerles ver a los jugadores que en este partido se jugaba el seguir peleando por el objetivo o que todo se terminara hoy (ayer) mismo. Y pudimos conseguir la victoria”. El entrenador señaló que “tenemos que seguir peleando. Es difícil, pero no imposible. Este grupo está vivo”.