Director de higiene

Locales | 15 Dic En respuesta a los reclamos presentados por los vecinos de la zona de calle Carlos Albo entre Tacuarembó y avenida Salto, sobre el color y olor de las aguas estancadas en el barrio al descender las aguas de la creciente del río Uruguay, el director de Higiene doctor Eduardo Américo explicó que “en principio, cuando el río comenzó a crecer, todo hacía pensar que la rotura del viejo colector que sale de Paycueros y que recibe pluviales de la planta era lo que estaba saliendo y que la coloración y el olor eran la suma del sedimento por arrastre y que lógicamente podía haber quedado del viejo colector”.
“Sin embargo, en los días siguientes, ante la preocupación de la gente la Dirección de Higiene estaba haciendo un muestreo diario al mediodía del agua que salía del registro con el desperfecto y los resultados variaron de un día para el otro y empezó a verse que la DBO (variable que define en general si se trata de agua pluvial o agua de naturaleza industrial) --en este caso era de esperar que fuera industrial-- cambió repentinamente y nos hizo pensar que se agregaba al agua pluvial una filtración del efluente industrial”, explicó.
Añadió que “eso se interpretó debido a la presión ejercida por el río, que había invadido las napas y por ende el sistema colector también, y no se podía confirmar debido a que el río cubría totalmente esa área. Cuando el río empezó a bajar, se tomó una medida de mitigación que fue construir un murito de 30 centímetros de alto en el entorno del registro (ubicado sobre el cantero de avenida Salto) y una vez que el río se situó por debajo de los 7 metros, se decidió que ni bien lo permitiera la presión del río y siguiera bajando se iban hacer las reparaciones correspondientes”. Tales arreglos comenzaron ayer de mañana y en no más de 48 horas –desde la víspera-- quedarán concluidos.
Estos pasos se cumplieron en conocimiento de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama), que se ha comunicado con la empresa y pedido un detalle pormenorizado del desarrollo de los hechos, qué medidas se adoptaron y cómo se está realizando la reparación. Américo agregó que “lo que la Dinama quiere destacar es que los vecinos de la zona deben permanecer tranquilos porque en este momento es más importante lo que sobresalió de saneamiento doméstico que lo que salió de efluente industrial. Dado que se trata de un efluente tratado que tiene un seguimiento periódico de la Dinama, está todo dentro de los parámetros aceptados, a pesar que sí se comprobó que hubo derrame de efluentes industriales pero en menor cantidad que los de los saneamientos”. En cuanto a los posibles daños a la salud fue contundente en afirmar que “como médico quiero desdramatizar, en el sentido que la Dinama tiene la plena convicción que lo que sucedió en ese punto no va a dañar ni el ambiente ni la salud y por eso queremos llevar tranquilidad a la población. Ahora se están haciendo correcciones de las dos cosas, porque en cuanto al tema industrial ya se comenzó con la reparación y en cuanto a lo doméstico, se está priorizando la ida de barométricas a esa zona que tiene la mayoría de sus pozos desbordados y de esa manera el tema volverá a la normalidad”. Los datos climatológicos indican que a partir del miércoles se esperan lluvias en la región que no van a tener incidencia en el aumento del río ,pero son beneficiosas para el lavado de las calles, porque actuaría como limpieza de arrastre. Finalmente aclaró que “fue una inundación tan importante que por ende ha causado un impacto ambiental de esta magnitud, y no podemos decir que los vecinos no tienen razón ni tampoco estamos minimizando el hecho, pero siempre después de una inundación hay situaciones graves desde el punto de vista ambiental y sanitario”, concluyó.