Policiales | 26 Dic Los sanduceros recibieron la Navidad con relativa tranquilidad, sin verse involucrados en demasiados incidentes ni en accidentes de tránsito de gravedad. No hubo heridos de entidad por mal manejo de pirotecnia y el delito se mantuvo en los parámetros normales. No obstante, un incendio en la Estación Experimental “Mario A. Cassinoni” y las intensas lluvias registradas durante la mañana del 24 motivaron la intervención de Bomberos y la Policía medió en algunas disputas familiares, fundamentalmente registradas en zonas periféricas de la ciudad. El consumo de alcohol fue protagonista casi excluyente en la mayoría de los accidentes de tránsito, en tanto se registraron algunas escaramuzas entre los jóvenes que regresaban a la ciudad luego del tradicional baile del Paysandú Golf Club.
Desde el miércoles hasta la nochebuena y las primeras horas de la Navidad, los efectivos de la Seccional Primera de Policía vivieron horas de relativa tranquilidad, perturbada por varios accidentes de tránsito y algunos hurtos, uno de ellos de considerable volumen. De acuerdo a información extraoficial, la seguidilla de accidentes en esta jurisdicción comenzó el miércoles por la noche en las inmediaciones de avenida España y Doctor Felippone. Desde esa intersección fue trasladada a un centro asistencial Andrea Beatriz Silva Gómez, de 34 años, conductora de la moto Yumbo matrícula IBL 153, quien presentó erosiones y traumatismos, así como fractura de tibia y peroné. Asimismo, una menor de 6 años que viajaba como acompañante sufrió politraumatismos. La policía determinó que circulaba hacia el este por Avenida España y al llegar al citado cruce entró en colisión con una camioneta Fiat matrícula IAD 5787, que se desplazaba hacia el sur por Felippone. En esta jurisdicción, entre la noche del 24 y el mediodía de ayer se registraron accidentes de tránsito en Bolívar y Larrañaga, Bulevar Artigas y Washington, Zorrilla de San Martín y Purificación y Bulevar Artigas y Colón. Asimismo, próximo a las 23.30 del jueves, delincuentes dañaron la vidriera de un comercio ubicado en Avenida España y Guayabos para llevarse calzado y prendas de vestir. También delincuentes se introdujeron en una vivienda y hurtaron una computadora portátil, 8.000 pesos, aprieta corbatas, cadenas y anillos de oro, y una garrafa de 13 kilos.
Seccional Segunda
Las consecuencias de la inundación repercutieron considerablemente en la operativa de la Seccional Segunda, donde según información extraoficial la nochebuena fue particularmente tranquila, la concentración de personas únicamente en la zona sur del cantero de la zona balnearia y hubo un relativo buen comportamiento de quienes se acercaron hasta las inmediaciones de Plaza Artigas.
No obstante, se registraron accidentes de tránsito, uno de los cuales determinó la internación de un joven de 27 años en el CTI del Hospital de Tacuarembó. Según información extraoficial, Cristian Osvaldo Álvarez Balderramos, conductor de la moto Zanella matrícula IAQ 327, fue trasladado al Hospital Escuela del Litoral, donde presentó politraumatismos, traumatismo encéfalo craneano con pérdida de conocimiento, aliento alcohólico, ataxia y disartria, debiendo ser trasladado al CTI del Hospital de Tacuarembó. Según pudo determinarse, próximo a las 8 circulaba hacia el Este por Leandro Gómez y al llegar al cruce con Libertad perdió el equilibrio y cayó. No tenía libreta de conducir ni usaba casco protector.
Otro accidente en jurisdicción de la Seccional Segunda se registró el jueves por la tarde en la esquina de Sarandí y Carlos Albo. Heriberto Paulino De Los Santos, de 48 años, conductor de una moto Vince 125 cc. fue trasladado a un centro asistencial donde presentó fractura de peroné derecho y erosiones en ambos brazos, en tanto su acompañante, Eduardo Gilberto Satre Pereira, de 25, reveló erosiones en brazos.
Indagado De Los Santos, quien no estaba habilitado para conducir, dijo que circulaba hacia el oeste por Sarandí y al llegar al referido cruce entró en colisión con un automóvil. Se trataba de un auto matrícula M.A.D 1570, conducido por Walter Noel González Rodríguez, de 46. La prueba de alcoholemia practicada a ambos conductores superó el parámetro establecido por la ley.
A diferencia de otros años, la mayor aglomeración humana se registró en el área sur de la zona balnearia, desde el complejo Irene Sosa hasta el Obelisco, donde no hubo incidentes de gravedad. Ayer, próximo a las 15, efectivos de esta dependencia detuvieron a un hombre acusado de protagonizar un incidente en la zona sur de calle Ledesma y ya sobre las 23 intervinieron en una disputa entre vecinos registrada en el barrio P3.
Seccional Tercera
El territorio bajo jurisdicción de la Seccional Tercera de Policía también fue escenario de varios accidentes de tránsito de diversa entidad. Además, concentró la actividad de miles de sanduceros que desde los primeros instantes del 25 iniciaron su peregrinaje hacia la zona del Paysandú Golf Club, en cuyas instalaciones se desarrolló el tradicional baile. Hubo algunas escaramuzas, corridas y abundante consumo de alcohol, pero afortunadamente no se registraron hechos graves.
De acuerdo a información extraoficial, el primer accidente de tránsito acontecido en esta jurisdicción en la víspera de la Navidad se registró en la zona de Ruta 90 y Letra N. Próximo a las 8 de la mañana, Patricia Santos, de 29 años, se desplazaba por Letra N en una camioneta perteneciente al Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. A pocos metros de la entrada de una chacra, la camioneta se fue hacia el terraplén y volcó sobre su costado izquierdo. Sufrió rotura de parabrisas y daños en techo y puerta izquierda, pero afortunadamente la conductora resultó prácticamente ilesa.
Ayer en horas de la mañana se produjo otro accidente en la esquina de Río Negro y Felipe Argentó. Desde allí fue trasladado a un centro de Salud Félix Rafael Gutiérrez, conductor de una moto Suzuki matrícula IBC 273, quien presentó politraumatismos. Indagado por efectivos de la Seccional Tercera dijo que se desplazaba hacia el sur por Felipe Argentó y al llegar al citado cruce chocó con un minibus, cuyo conductor -aseguró- no le prestó asistencia. Posteriormente fue indagado Elbio Ribas, de 40 años, conductor de la camioneta KIA matrícula RA 7717, quien declaró que circulaba hacia el Este por Río Negro y en la referida esquina chocó con un motociclista. La prueba de alcoholemia practicada a ambos conductores arrojó resultado positivo.
A pesar de que más de 4.000 personas acudieron al baile de Paysandú Golf Club, los instantes inmediatamente posteriores a su finalización fueron relativamente tranquilos. Pasadas la siete de la mañana largas filas humanas se desplazaban desde la zona del Trébol hasta el cruce con Bulevar Artigas. Hubo algunas escaramuzas y las típicas corridas, pero nada pasó a mayores. Próximo a las 8, los ocupantes de una camioneta blanca interceptaron a un grupo de jóvenes en las inmediaciones de Avenida República Argentina y Enrique Chaplin. Uno descendió del vehículo armado con un trozo de metal, pero luego de algunas amenazas e insultos todo volvió a la tranquilidad.
En lo que respecta al delito en esta zona de la ciudad, los propietarios de una vivienda ubicada en calle Israel se comunicaron con la policía en horas de la madrugada para denunciar que tras regresar de la casa de unos familiares, comprobaron que delincuentes habían ingresado a la propiedad y se habían llevado un televisor y un radiograbador.
Bomberos
Las intensas lluvias registradas durante la víspera de la Navidad redujeron considerablemente el riesgo de que se produjesen incendios forestales relacionados al uso de pirotecnia. Sin embargo, los efectivos del Destacamento de Bomberos desarrollaron intensa actividad. El jueves próximo al mediodía, se trasladaron hasta las instalaciones de la Estación Experimental “Mario A. Cassinoni” de la Facultad de Agronomía, donde se había desatado un incendio. Según información extraoficial, el recalentamiento de una incubadora generó un siniestro que afectó costoso equipamiento como microscopios, heladeras y freezers. Los efectivos trabajaron durante casi dos horas hasta finalmente sofocar las llamas, pero las pérdidas fueron cuantiosas y ascenderían a casi 80.000 dólares.
Esa mañana, los bomberos también acudieron a varias zonas de la ciudad donde la lluvia había anegado numerosas viviendas. En la zona céntrica, uno de los edificios más afectados fue el de la jefatura departamental de INAU.
Al igual que en el resto del país, los accidentes relacionados al mal uso de pirotecnia fueron relativamente escasos. Información extraoficial obtenida en centros de salud y emergencias móviles señala que hubo muy pocos lesionados, en su gran mayoría de escasa entidad.