Locales | 11 May Preocupa a los vecinos y productores de las zonas aledañas a ruta 90 “De los Charrúas” el mal estado en que esta se encuentra en la mayor parte de su tramo, especialmente de Piedras Coloradas al Este.
No se trata únicamente de pozos, sino también de la existencia de huellas de hasta 15 a 20 centímetros de profundidad en el pavimento, provocadas por las pesadas cargas que transitan por la ruta. Las mismas, representan un verdadero peligro para el tránsito que incluye la posibilidad de provocar accidentes.
La situación actual es especialmente complicada para los vecinos que la utilizan a diario para transportarse a centros poblados de la zona para trabajar, estudiar o atender su salud, así como también a turistas que eligen las Termas de Almirón como lugar de descanso.
En este sentido, el estado actual de “la 90” desalienta a quienes desean emprender el viaje a dicho centro termal o a la ciudad de Guichón, que posee interesantes propuestas de ecoturismo y turismo aventura en desarrollo. La situación ha sido denunciada públicamente en la Junta Departamental y también la Cámara de Diputados, en tanto que hasta llegó a las redes sociales y se ha creado un grupo en Facebook, que reclama una solución urgente para ruta 90.
Bajo el título de “Que arreglen toda la ruta 90 de Paysandú-Guichón” el grupo ha logrado casi 500 adhesiones de personas que sostienen que “esta carretera es una lástima” y “¡está llena de pozos!” También piden continuar el ensanche de la ruta --que llega sólo hasta el kilómetro 15 en pueblo Esperanza, tramo que se encuentra en buen estado-- y reclaman a las autoridades que “se pongan las pilas” para gestionar las mejoras necesarias.