A orillas del Daymán

Locales | 27 Oct En territorio de Paysandú pero a escasos metros del inicio de la jurisdicción territorial de Salto, la existencia de un asentamiento en el que viven en precarias condiciones unas 30 familias en las inmediaciones de un hotel cinco estrellas, plantea el desafío a ambos gobiernos de encontrar algún tipo de solución.
Consultado al respecto, el director de Turismo de Paysandú, doctor Marcelo Tortorella, dijo a EL TELEGRAFO que el tema ha sido planteado a la Intendencia y que existe acuerdo entre ambas comunas de buscar una solución e iniciar gestiones con diferentes organismos nacionales, para ofrecer alternativas que mejoren la calidad de vida de esas familias y a la vez atender los legítimos intereses de empresas que brindan trabajo y prestan servicios de alta gama en la zona.
El asentamiento existe desde hace aproximadamente once años y sus integrantes tienen, mayoritariamente, la recolección y clasificación de residuos como estrategia de sobrevivencia. Se encuentra ubicado en el camino de acceso al Resort y Spa Termal Los Naranjos, unos tres kilómetros antes del mismo. Dicho hotel está en territorio sanducero pero casi en el límite con Salto e incluso se provee de agua termal de Daymán. Los clientes del hotel deben pasar junto al asentamiento para llegar a él, en tanto también se registran talas de monte en propiedad del emprendimiento. De acuerdo a datos recogidos entre operadores turísticos de la zona, cuando fue inaugurado el hotel “había tres o cuatro” viviendas precarias, pero “hoy es un pueblo”.
“El asentamiento se ha extendido hacia la ruta y la gente vive en una situación bastante caótica porque ahí no hay baños ni ningún tipo de servicios. Hay muchos niños chicos y adolescentes que ya son madres”, dijo un empresario al dar cuenta de la complejidad del problema social del asentamiento. “Hay un grupo nuevo de gente que se instaló allí, que hacen clasificación de basura. En la entrada al hotel están clasificando basura, las cosas quedan tiradas ahí, incluso al lado de la ruta”, agregó.
Por su parte, el director municipal de Turismo asegura que la Intendencia de Paysandú “ve con mucha preocupación esta situación y vamos a iniciar gestiones ante el Ministerio de Vivienda y de Desarrollo Social y la Unidad de Vivienda de la Intendencia, para ver qué podemos hacer para resolver este tema”. Agregó que es necesario analizar la situación para “ver de qué manera se erradica este asentamiento irregular y en qué lugar se puede reubicar a esas familias, con lo que tendrían cubiertas sus necesidades habitacionales en forma adecuada, sino también contar con los servicios que mejoren su calidad de vida. El hecho de que el asentamiento se siga desarrollando en el lugar donde está afecta el entorno”, agregó.
“El intendente Bertil Bentos está preocupado por el tema y esperamos encontrar alguna alternativa en conjunto con la Intendencia de Salto, porque si bien el asentamiento está en Paysandú, tenemos entendido que parte de esas personas son oriundas de Salto y sus medios de sobreviviencia están relacionados también con el vecino departamento”, añadió.