Policiales | 14 Nov Cuatro efectivos policiales heridos y un móvil gravemente averiado, fue el lamentable saldo de un grave incidente registrado durante la tarde de ayer en el Barrio Curupí, al Noroeste de la ciudad. El desorden se generó cuando personal de la División Hurtos y Rapiñas de la Seccional Segunda se introdujo en el vecindario para atrapar a un conocido delincuente que acababa de hurtar una cámara fotográfica a pocas cuadras de allí.
Según información primaria obtenida por EL TELEGRAFO, el hecho se produjo próximo a las siete de la tarde. En ese momento, dos efectivos de Hurtos y Rapiñas de la referida seccional se trasladaron en moto hasta la zona de Libertad y Antonio Estefanell, ya que momentos antes un conocido delincuente apodado «el Pocho» había hurtado una cámara fotográfica y se había fugado en dirección al cercano barrio «Curupí». Cuando los efectivos llegaron a la zona de Libertad y Proyectada 72 (una de las entradas al barrio) observaron que el sospechoso intentaba escabullirse hacia el interior del vecindario, pero lograron atraparlo y esposarlo.
Comienza el incidente
En momentos en que los efectivos se preparaban para trasladar al sospechoso, una multitud compuesta por unas cincuenta personas emergió de las entrañas del barrio y comenzó a agredirlos a golpes y pedradas, hasta conseguir que el detenido –aún esposado- se diera a la fuga. Mientras los policías recibían una andanada de golpes, algunos integrantes de la turba aprovecharon para llevarse una de las motos y ocultarse luego en alguna de las muchas callejuelas que atraviesan el lugar. Inmediatamente dos unidades motorizados de Radiopatrulla y de la Seccional Segunda acudieron en apoyo de sus compañeros y poco después arribaron otros móviles del Grupo Geo, Radiopatrulla y de la Seccional Segunda, provocando la huida de los agresores. No obstante, una lluvia de piedras comenzó a caer sobre efectivos y vehículos policiales impactando fundamentalmente en una de las camionetas doble cabina, la que resultó con el parabrisas destrozado y averías en la carrocería. Mientras los policías heridos eran retirados del lugar, se montó un amplio operativo de rastrillaje en toda la zona hasta que finalmente pudo recuperarse la moto, aunque «El Pocho» logró ponerse fuera del alcance de sus perseguidores.
El saldo del incidente fue de cuatro policías lesionados (un de ellos era sometido al cierre de la presente edición a una tomografía computada), un móvil dañado y una moto con algunas averías. Si bien no fue posible detener a los agresores, seguramente se practicarán nuevos procedimientos en las próximas horas hasta dar con los responsables de este lamentable episodio.