Locales | 06 Feb La sucesión de días con intensas lluvias han afectado el cronograma de trabajos de vialidad urbana y rural, en el primer caso incluyendo las tareas de bacheo y reconstrucción de calles que se habían previsto oportunamente, pero se espera que se supere la inestabilidad climática para seguir en la tarea de “impacto” en la vialidad, destacó a EL TELEGRAFO el director general del Departamento de Obras, Nicolás Olivera, quien acotó que los equipos municipales hacen lo posible en los cortos períodos de mejora del tiempo.
En este sentido apuntó que esperan “que se estabilice el tiempo para encarar varios trabajos” previstos para este año. “Como es el caso de continuar con un trabajo de impacto en la repavimentación urbana, con trabajos de carpeta asfáltica más que nada en el centro de Paysandú, y con tratamiento bituminoso en el área periférica”, dijo.
“Veníamos a muy buen ritmo el año pasado, e incluso redoblamos y reasignamos nuevos recursos y tenemos otra maquinaria trabajando para dar otro impacto este año, pero lamentablemente hasta ahora, hasta que el tiempo no lo permita, no podemos actuar con la intensidad que tenemos previsto”, explicó el jerarca.
Olivera señaló asimismo que en el caso del camino a Casa Blanca, “que dijimos que lo comenzaríamos tan pronto lo permitieran las condiciones del tiempo, precisamente ha quedado pendiente de las condiciones meteorológicas de estos días”.
Reconoció que “hoy por hoy el estado del pavimento en el que no se ha intervenido, donde quizás hace quince años que no se interviene, tiene una decadencia que en la curva de la gráfica de conservación del pavimento indica que llega un momento en que el deterioro se precipita, y es ahí cuando tenemos zonas que ya no son recuperables mediante bacheo, sino que las hemos tenido que hacer a nuevo”. “Lo que hemos hecho está bien, pero donde no hemos llegado lamentablemente se sigue deteriorando y el retraso por las lluvias y la propia acción del agua socavando la base determina que los problemas se agraven”, puntualizó.
En lo que tiene que ver con la disponibilidad de material a través de la planta asfáltica, explicó que durante la licencia del personal la fábrica fue sometida a “un muy importante trabajo de mantenimiento e incorporación de nuevas tecnologías, con una fuerte erogación económica, y estamos ahora en la expectativa de emplear el material para el trabajo de impacto a que nos referíamos”. Pero hasta ahora, ante la irregularidad del tiempo, “no hemos podido empezar con las calles, aunque hemos encarado sí bacheos. Queremos largar cuanto antes pero estamos a la espera”.
“Es decir que hemos tenido alguna producción antes de la lluvia pero la queremos probar con un trabajo más exigente en volumen, a través de la construcción y reconstrucción de calles”, amplió Nicolás Olivera.

AFECTACIÓN DE CAMINERÍA RURAL
En lo que refiere a la caminería rural, el director general de Obras expuso que lamentablemente no sólo se deteriora por el registro de fuertes lluvias, sino que “estamos ante algunos vecinos aún no conscientes de la prohibición que existe para salir con camiones cargados los días de lluvias o con posterioridad a las precipitaciones”.
“Debemos decir que si bien en algunos casos es entendible por la producción perecedera, como puede ser la leche, en otros casos en que perfectamente se puede esperar los camiones salen igualmente cargados o transita maquinaria que destrozan la caminería”.
Consultado sobre si se está en condiciones de identificar y sancionar a quienes así actúan, Olivera subrayó: “Efectivamente, hemos iniciado algunos procesos administrativos para la aplicación de multas contra quienes proceden de esta forma desaprensiva. Pero, claro, el punto pasa por detectarlos, y siempre exhortamos a los propios vecinos de la zona a que denuncien a quienes rompen los caminos que debemos cuidar entre todos. A veces nos avisan, e incluso hay veces que quedan empantanados y tiene que ir un tractor a sacarlos, y realmente se hace un gran destrozo del camino”.
“Cuando los infractores son detectados, procedemos a la aplicación de multas y resarcimientos correspondientes, y apelamos también naturalmente a la buena voluntad de los vecinos para que denuncien estas situaciones e incluso con un celular saquen fotos y las hagan llegar a la Intendencia, porque es una manera asimismo de que paguen los que rompen y para que los equipos municipales no tengan que estar permanentemente en los campos reparando destrozos”, indicó el director general de Obras.