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Paysandú, Lunes 05 de Junio de 2017

Trabajadores desocuparon planta de ALUR pero continúan el paro

Locales | 15 Ago Los obreros que ocupaban ALUR debieron entregar sus instalaciones ante un fallo de la justicia civil que hizo lugar a una acción de amparo solicitada por otro grupo de trabajadores. El desalojo se realizó con “total normalidad y con una recorrida de los escribanos de la empresa que verificaron las instalaciones”, señaló el delegado de Teyma, Héctor Díaz.
En tanto, se mantiene el campamento frente a la planta de bioetanol y las medidas de paralización de las actividades. “No compartimos pero acatamos el dictamen de la justicia por entender que la ocupación es una extensión del derecho de huelga y además, aclarar que la denuncia no fue presentada por ninguna de las empresas contratadas sino por capataces y personal administrativo”, puntualizó.
Díaz informó que el Sunca programa la realización de un paro parcial el próximo martes 19, de 9 a 13, con movilizaciones por el centro de la ciudad y concentración frente a la obra de ALUR, en solidaridad con los trabajadores paralizados. El dirigente recordó que reclaman el pago de premios por productividad, la participación en cursos de capacitación y la cuota de género en la industria de la construcción. Explicó que “los trabajadores de Teyma cumplían los plazos establecidos para la entrega de las obras e incluso este mes se cerraba el acuerdo sobre esa reivindicación porque el montaje de la obra civil estaba prácticamente finalizada. Tanto es así, que a fin de este mes esperábamos recibir el premio”.
No obstante, se verificaba “un cierto retraso en las obras correspondientes a la empresa Saceem, donde los trabajadores entienden que no son responsables por trabajos que se debieron hacer dos o tres veces porque se hicieron mal, con personal de confianza que se trajo desde Montevideo. A esto se sumó la creciente del río --porque se construía una cañería que viene desde allí hacia la planta--, la falta de materiales y se agregó más trabajo al acordado en primera instancia por el premio. La empresa no quiere reconocer eso ni los días de prórroga otorgados por ALUR y sin una instancia de negociación decidieron cortar los premios”, dijo Díaz.
El delegado agregó que “Teyma alude a la existencia de una cláusula de paz por la cual no podíamos sumarnos al conflicto. Cabe aclarar que nunca nos declaramos en conflicto con la empresa Teyma hasta que nos quitó el premio, sino que anteriormente respetábamos las medidas que tomaban los demás trabajadores y que no nos afectaba. Cuando los otros obreros instalaron los molinetes, estábamos impedidos de ingresar. No obstante, no nos íbamos a pelear entre trabajadores porque conocemos las acciones de estas empresas”, detalló.
Según Díaz, “hay otros incumplimientos como la capacitación en obra, por la cual ALUR había destinado un monto de dinero y no se ha concretado, así como la inserción de la mujer o fallas en la seguridad”. En referencia a este último aspecto, el delegado remarcó que debieron transitar “por tres días de paro para exigir una ambulancia y un delegado de seguridad para evitar accidentes. Después de esas instancias, no tuvimos accidentes graves”. El dirigente de los trabajadores de Teyma añadió que se constataron “irregularidades con trabajadores que trajeron de Brasil por debajo del laudo de la construcción en Uruguay e hicimos denuncias de esto también”, concluyó.
Delegados de Teyma ante la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra), representantes de la empresa y directivos de la Cámara de la Construcción se reunieron durante la tarde de la víspera para avanzar en una mesa de negociación en la mencionada dependencia ministerial, en Montevideo. Según Díaz, la jornada resultó auspiciosa “pero no significa que el conflicto se solucione, sino que hay buenas señales para continuar el diálogo”, indicó Díaz.
Por otro lado, los trabajadores instaron a la conformación de una mesa de diálogo con la participación de Ancap, ALUR y las empresas contratistas, “con el objetivo de contribuir a levantar este conflicto”.

LA EMPRESA
Desde la empresa Saceem se confirmó un “ingreso correcto a las instalaciones y estamos a la espera de las resoluciones del sindicato para retomar las obras. Aseguramos que aquellos operarios que quieran trabajar, pueden hacerlo”, al tiempo de asegurar que con el fallo de la Justicia Civil “se ha reconocido el derecho a trabajar sin que nadie se los impida”.
La empresa a cargo de una parte del proyecto, ha reconocido un avance sustantivo de las tareas, en tanto mantiene la expectativa de finalizar “este año”, no obstante, no se cumplen con los plazos previstos en función de los atrasos registrados por medidas sindicales. “Hay que tener en cuenta que estas medidas se adoptaron cuando hay un convenio colectivo de la rama de la construcción que prevé el cumplimiento de ciertos pasos antes de la adopción de medidas radicales como el paro” y señaló la necesidad de convocar a “una comisión previamente”.
Saceem “ha cumplido con todos los aspectos referidos al convenio colectivo, salariales y no salariales, además del convenio particular de productividad que había firmado con sus empleados. Lamentablemente sus objetivos no se pudieron cumplir porque estos convenios se firman para beneficio de ambas partes. Cuando el objetivo no se logra, los trabajadores no pueden cobrar el premio por productividad que estaba en ese convenio”, remarcó.
La empresa agregó que “el perjuicio no corresponde únicamente a estas medidas adoptadas últimamente, sino por varias anteriores”, de lo contrario “se hubieran cumplido los plazos previstos”.


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